Indra, como otros grandes consultoras nacionales, sigue sufriendo en España y salvando los resultados con la actividad exterior. Las ventas totales de Indra en el primer semestre de 2014 alcanzaron los 1.476 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 5% en moneda local (y una caída del 1% en euros). Mientras tanto, el resultado ascendió a 60 millones de euros, lo que supone un aumento del 27% sobre el mismo periodo de 2013 en buena parte por los menores gastos extraordinarios.
Las ventas en España de Indra representaron en el periodo el 39% del total. No obstante cayeron un 9%. Aunque para el conjunto del ejercicio Indra mantiene la expectativa de un descenso de las ventas en España, la firma prevé que su comportamiento mejorará en la segunda mitad del año. En la zona AMEA (Asia, Oriente Medio y África) ha tenido una buena evolución, con crecimiento 18% en euros, mientras que en Europa y Norteamérica creció un 10%, y en Latinoamérica, un 14% (lo que supuso, eso sí, una caída del 4% en euros por la fuerte depreciaciación de las monedas locales).
Por mercados verticales, y en moneda local, las administraciones públicas y la sanidad crecieron un 25%; transporte y tráfico aumentaron un 10%; y servicios financieros, un 6%. Por su parte, seguridad y defensa se estancaron, mientras que la actividad en energía e industria tuvo una caída del 3%, y telecomunicaciones y medios, un descenso del 13%.
La contratación se situó en 1.647 millones de euros y es un 12% superior a las ventas, en línea con el primer semestre de 2013. Destacó la contratación en España, que aceleró su crecimiento (3% en el primer semestre de 2014 frente a una caída del 15% en el mismo periodo del año anterior). Por su parte, la contratación en el resto de geografías sigue siendo relevante (sobre todo en AMEA y Latinoamérica, con tasas de crecimiento de doble dígito).
