Gartner prevé que durante 2016 se comercialicen en todo el mundo 274,6 millones de wearables, lo que supone un crecimiento del 18,4%. Esas ventas generarán, según la consultora, unos ingresos de 28.700 millones de dólares, de los cuales más de un tercio (concretamente 11.500 millones) provendrán de la venta de relojes inteligentes, categoría estrella en este mundo de los dispositivos para llevar.
Angela McIntyre, analista de Gartner, confía en que los relojes de Apple ayudarán a popularizar los wearables en los dos próximos años. Asimismo, dice que los smartwatches alcanzarán una facturación de 17.500 millones de dólares en 2019, alrededor de un tercio más que lo esperado para este ejercicio.
Gartner cree que una de las tecnologías más calientes de los próximos años serán los wearables para mantenerse en forma, entre los que se incluyen pulseras, correas para el pecho o relojes para deportistas. El futuro es especialmente brillante para los fabricantes de relojes para deportistas, que serán la opción preferida para runners y ciclistas por la facilidad de uso, la duración de la batería o la interfaz que llevan. Además, son unos dispositivos que se aprovecharán de la aparición de nuevos sensores y herramientas de análisis de la actividad.
