En los últimos años, el mercado de la seguridad informática ha sido uno de los que mejor han capeado la crisis. En 2015, también acabará al alza. Según las últimas previsiones de Gartner, el gasto de empresas, particulares e instituciones en soluciones de seguridad alcanzará los 75.400 millones de dólares, lo que supone un incremento del 4,7% con respecto a 2014.
Gartner detecta que las iniciativas gubernamentales, una legislación más férrea en la protección de los datos y la ampliación de las brechas de seguridad están detrás de este repunte. Además, el testeo de seguridad, las actividades de outsourcing y la gestión de identidades y accesos presenta las mayores oportunidades.
Gartner también dice que sectores muy commodity como los de seguridad para el ordenador de casa o para el puesto de trabajo (endpoint) tendrán bajadas. “El interés en el ámbito de la seguridad se centrará en entornos como el cloud, la movilidad o el Internet de las cosas, así como los ataques avanzados y muy dirigidos”, asegura Elizabeth Kim, analista de Gartner.
Gartner también señala que como la mayoría de los productos de seguridad que se comercializan en todo el mundo tienen su origen en Estados Unidos, los precios han subido en muchos casos hasta un 20% en mercados como el europeo. Esto llevará en parte a que las ventas se resientan en alguna medida en los próximos meses, aunque la consultora dice que habrá un rebote en 2016 debido a que esas compras pospuestas se materializarán y a que los cambios de moneda también se estabilizarán a partir de ese momento.
