Según un estudio de Bitkom (Asociación Alemana de las Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones), casi el 50% de los internautas usa entre uno y diez servicios online diferentes; y un tercio, entre 11 y 20, cada uno de los cuales está protegido por una contraseña. Sin embargo, la gran mayoría de las contraseñas que se usan para proteger cuentas bancarias, correos electrónicos o redes sociales ponen en peligro la privacidad de nuestros datos personales.
“Seguimos usando contraseñas que se inspiran en nuestra información personal. Son fáciles de recordar pero muy vulnerables”, afirma Tim Berghoff, experto en ciber seguridad de Gdata. “Las combinaciones de diez caracteres alfanúmericos que incluyen mayúsculas y minúsculas son claves mucho más seguras. Además, está terminantemente prohibido usarlas en más de un servicio”.
Cuatro errores frecuentes:
- Una contraseña para todo. Ante la imposibilidad de memorizar un número elevado de contraseñas diferentes, muchos internautas apuestan por usar una misma clave para acceder a diferentes servicios online.
- Usar información personal a modo de clave.
- Contraseñassin fecha de caducidad. Modifica tus claves periódicamente, no las compartas con nadie y usa una diferente para cada servicio web.
- Guardarlas en el navegador, especialmente si compartes dispositivo con otras personas.
Seis reglas sencillas para conseguir una contraseña robusta
- Que sea larga, recomendable 10 caracteres.
- Que combine mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales.
- Que no incluya datos personales
- Que sea única para un determinado servicio.
- Password Manager o administrador de contraseñas. Es la forma más sencilla de cumplir con la obligación de tener contraseñas únicas y lo suficientemente complejas. Incluido en G Data Total Security.
- Autenticación doble siempre que sea posible en cualquiera de los servicios online en que te hayas registrado. Facebook, LinkedIn, Dropbox, Google, PayPal y otros proveedores igual de reconocidos ya ofrecen esta alternativa.
