La mayor librería electrónica del mundo, Amazon, lleva comercializando su tableta desde finales del año pasado y por el momento está batiendo récords y recordando que el fenómeno iPad puede repetirse. En el último trimestre se han vendido alrededor de 6 millones de Kindle Fire, en línea, eso sí, con las previsiones iniciales.
En el mismo periodo, Apple consiguió vender casi 15,5 millones de iPad, según la consultora de Stifel Nicolaus. Por consiguiente, dichos resultados colocan a los de Cupertino como la primera marca, con diferencia, en cuota de mercado, con el 58%.
Sin embargo, Apple ha perdido 10 puntos desde que Amazon empezase a comercializar el Kindle Fire en EEUU. Amazon, por su parte, se coloca segundo y ocupa por el momento una cuota del 22,5%. La estrategia de Amazon consiste en vender su dispositivo, ya muy rompedor en precio (se vende a 199 dólares en Estados Unidos y todavía no se comercializa en España), por debajo de su valor. Esta maniobra responde al planteamiento que la tienda electrónica adoptó con el Kindle, y que no es otro que vender los dispositivos a precios muy asequibles para, por otro lado, recuperar con las suscripciones y ventas de contenidos online, que ha sido el negocio por antonomasia de la compañía. Según la consultora In Stat, en 2011 se vendieron 60 millones de tabletas de todas las marcas y para 2012 las previsiones hablan de 100 millones de unidades. De todas ellas, 38% estaban dotadas de un sistema operativo de Android, como lo está Kindle Fire, que cuenta con una versión Android personalizada.
Sin embargo los analistas advierten que, con la más que probable salida al mercado del iPad 3 (supuestamente a finales de febrero), Apple baje considerablemente el precio de la segunda versión del iPad para dejarlo al nivel del Kindle Fire. En la otra cara de la moneda se encuentran los grandes fracasos del mercado de las tabletas. Es el caso, por ejemplo, de la Playbook de RIM, de la que se han vendido unas 500.000 unidades, o de aquellas que integran el sistema operativo Windows de Microsoft, de las que apenas se han podido vender 400.000 unidades.




