Por Juan Ignacio Cabrera    El mundo era mucho más aburrido en 2001, cuando CHANNEL PARTNER salió por primera vez a la calle. O por lo menos las posibilidades de acceder a los contenidos multimedia (música, fotografías, películas, vídeos…) eran mucho menores. En el año que cayeron las Torres Gemelas todavía muchos íbamos al videoclub a buscar películas en formato VHS. Eran pocos todavía los que se habían desprendido de sus cámaras de carrete de toda la vida y se habían pasado a al megapíxel. Por supuesto, la televisión seguía siendo enteramente analógica, salvo en las propuestas de pago de Canal Satélite Digital o del cable, todavía incipiente.   El avance del mundo digital ha ido paralelo a las posibilidades de Internet, y a la altura de 2001 éstas no estaban explotadas: la Red sólo tenía 7 millones de usuarios en España, casi cuatro veces menos que en la actualidad. Además, las conexiones habituales eran bastante más lentas (tan sólo 56 Kbps) que las actuales, que suelen rondar los 4 o 6 Mbps.   Paralelamente, la oferta de contenidos era muy pobre. Predominaban las páginas meramente informativas y a nadie se la hubiera pasado por la cabeza pensar que con el paso del tiempo triunfarían formatos de alta colaboración como Facebook, Twitter, Tuenti o YouTube.   Hay una compañía que ejemplifica como ninguna el advenimiento del “estilo de vida digital”: Apple. La vuelta de Steve Jobs a la compañía de la manzana a finales de los 90 al día a día de la compañía dio lugar a varios hitos que han cambiado muchas cosas. Justamente a finales de 2001 llegó el bombazo del iPod, con el que Apple inventaba, de alguna manera, el sector del ocio digital. El austero dispositivo para escuchar música, del que se han vendido más de 100 millones de unidades en todo el mundo, no vino solo, sino que llegó acompañado de iTunes, la plataforma para gestionar los archivos musicales ideada por la compañía que ha sido capaz de vender música por Internet en un mundo dominado por las descargas gratuitas.   Pero no quedó ahí la cosa. A mediados de 2007, el mago Jobs se sacó de la chistera otro killer, el iPhone, un teléfono que ha generalizado el uso de pantallas táctiles en este tipo de dispositivos y que, con el respaldo de un reparto infinito de aplicaciones, ha cambiado el concepto de celular. La última joyita de Apple, la tableta electrónica iPad, que llega esta primavera al mercado español, también está en disposición de revolucionar algunos negocios, como el editorial. Así lo han proclamado los mismos editores de periódicos que durante años han visto como sus ediciones en papel menguaban sin tregua.   Pero en esta década no todo han sido éxitos. En el mundo del ocio digital también ha habido fracasos más o menos sonoros. Uno de ellos fue el del concepto de PC de salón, que se puso de moda hace unos años. Y es que, finalmente, para gestionar todo el ocio digital en el corazón de los hogares no se ha instalado un ordenador personal totalmente equipado, sino un aparato más modesto pero versátil: el disco duro multimedia. Un fracaso sonado fue el del Zune, el dispositivo de música MP3 con el que Microsoft quería hacerle sombra al iPod. También tuvo que dar marcha atrás en sus proyectos Toshiba con su formato de DVD de alta definición, en beneficio del Blu-ray, que tampoco las tiene todas consigo en un mundo en que al final todos los contenidos serán servidos desde Internet gracias al cloud computing.
  La digitalización de los hogares y las costumbres también han avanzado por el empuje del negocio del videojuego. Los éxitos de la PlayStation de Sony y de la Wii de Nintendo en España son irrebatibles, sobre todo en un país tan jugón como el nuestro. En fin, el estilo de vida digital ha llegado para quedarse y filtrarse por cada rendija de la existencia. La TDT y sus aplicaciones, la telefonía 4G, el vídeo bajo demanda, el iPad y la probable popularización del formato de tableta electrónica… todo mueve el mundo en un sentido.
Hitos   2001. Aparece el iPod, el reproductor de música dogital con el que Apple cambió el mundo.   2004. Marc Zurckerberg crea Facebook, una red dirigida en principio a los estudiantes de Harvard y que hoy cuenta con 400 millones de usuarios.   2006. Google compra YouTube, el primer servidor de vídeos gratuitos en Internet.   2007. Sale a la calle el esperado iPhone, el téléfono con pantalla táctil y múltiples aplicaciones de Apple.


