Con el dinero en el bolsillo que le proporcionó en julio la venta a Avnet de su negocio insignia, el de servidores y equipos de almacenamiento de HP e IBM, el mayorista Magirus quiere seguir comprando compañías en España y en Europa. Lo ha dicho el responsable de la firma en este país, Hugo Fernández, que reconoce que en estos momentos ya está viendo posibles candidatos a escala local. Fernández dice que su intención es integrar mayoristas con un claro perfil técnico y con no muchos empleados. “Nos interesa más el nivel de formación del personal que la base de clientes que puedan aportar”, reitera Fernández. Asimismo, Fernández confirma que el negocio de Magirus en España va como un tiro. Ya en el primer semestre del año creció un 35% y las expectativas para todo el ejercicio son aún mejores, pues Check Point ha vuelto recientemente a incorporarse a su catálogo de seguridad, mientras que está a punto de firmar un contrato con RSA. En consecuencia, la previsión inicial de la filial, que era la de acabar 2007 con unos ingresos de 35 millones de euros, podría quedar felizmente desbordada. ~
La virtualización es el área que más están avanzado en Magirus, donde el mayorista cuenta con un contrato de referencia, el de VMware, que le proporcionará este año alrededor de 10 millones de euros en ventas, y donde también está engrosando el catálogo con herramientas complementarias de DataCore, Provision Networks o Vizioncore. En estos momentos, la virtualización supone ya uno de cada cuatro euros que ingresa Magirus en España. Asimismo, otra área donde, por el momento, Magirus tiene una presencia testimonial, pero en la que quiere hacer más énfasis Fernández, es la del software libre. Aunque vende el catálogo de Red Hat, ha incorporado recientemente el gestor de bases de datos MySQL y está a punto de dar entrada a JBoss, la división de middleware de la misma Red Hat. No obstante, el directivo cree que este portfolio debe ser ampliado.
A pesar de todo, el principal sostén de la actividad de Magirus en España sigue siendo~ la seguridad y las comunicaciones, que es básicamente el negocio heredado de Allaso y que representa el 60% del balance. En este ámbito, las esperanzas están puestas en la ampliación del acuerdo con Nortel para no vender sólo soluciones de datos, sino también centralistas y teléfonos IP. El mayorista pone hoy en el mercado sistemas de datos del fabricante canadiense por valor de 8 millones de euros cada año.



