Bruselas ha amenazado a Microsoft con imponerle una multa de dos millones de euros diarios por incumplir un acuerdo de la Comisión de 2004. La multa viene motivada por el hecho de que Microsoft no ha facilitado la suficiente información a sus competidores para que desarrollen productos plenamente compatibles con Windows, como le requirió la Comisión. El contencioso se remonta al año 2004, cuando el comisario de competencia de la UE, Mario Monti, después de una investigación impuso una multa de 497 millones de euros a Microsoft por abuso de posición dominante. La empresa norteamericana hizo efectiva rápidamente la cantidad, y fue cumpliendo poco a poco los requerimientos de la Comisión. Estos requerimientos se basaban en dos puntos: el primero pedía que se distribuyese una versión del sistema operativo Windows sin el reproductor Media Player. El segundo de ellos solicitaba a la compañía que facilitase a sus competidores toda la información necesaria para que estos desarrollasen productos plenamente compatibles con el sistema operativo, y para que los servidores desarrollados por la competencia pudieran funcionar adecuadamente en Windows. Es aquí donde está el problema, puesto que la Unión Europea considera que la información facilitada por Microsoft es insuficiente y poco clara. Tras esto, Neelie Kroes, comisaria de Competencia, entabló varias negociaciones con Microsoft, sin llegar a un acuerdo final, por lo que ha tomado la decisión de imponer la multa.
La Comisión Europea ha dado cinco semanas de plazo a Microsoft para que cumpla con el último de los requerimientos. De lo contrario hará efectiva la imposición de la multa hasta que cumpla con lo estipulado. Ante esto, Microsoft se ha quejado de que la Comisión cambia constantemente sus demandas sobre antimonopolio. Sin embargo, la empresa de Bill Gates ha indicado que seguirá trabajando para cumplir con los requerimientos de la Comisión.


