La Asociación de Internautas ha alertado del bajo número de dominios «.es» que se registran en nuestro país en comparación con los dominios genéricos («.com» y «.net»). En el mes de septiembre se dio el peor resultado de los últimos dos años, con tan sólo 532 nuevos registros «.es» frente a 10.057 genéricos dados de alta. Estos datos son alarmantes si se comparan con los resultados de Alemania o Reino Unido, donde los dominios estatales dados de alta en septiembre fueron 92.703 y 93.996, respectivamente. Esta brecha con el resto del mundo es debida a las dificultades que conlleva el adquirir un dominio «.es»: trabas burocráticas (en los genéricos sólo es necesario comprobar que no exista el dominio), lentitud (mínimo de 24 horas frente a la instantaneidad en los genéricos) y altos precios (a partir de 110 euros cuando los genéricos cuestan una media de 15 euros). El mismo director general de Red.es (entidad pública empresarial que vela por el desarrollo de la sociedad de la información en España), Ramón Palacio, ha reconocido que sería necesario abaratar los costes. Aunque, según ha informado la Asociación de Internautas, esta acción sería inútil si no se liberalizasen a la par los dominios de segundo nivel. Aun así, los dominios de segundo nivel («.es») han superado en número a los de tercer nivel («.com.es», «.org.es»).
En España tan sólo existen 81.736 dominios «.es», mientras que en Alemania existen casi ocho millones. Sin embargo, nuestro país ocupa la décima posición mundial en dominios genéricos, con casi 600.000 sites. La Asociación ha pedido al gobierno que tome serias medidas en el asunto.
Esta cuestión repercute de lleno en el canal. Si las empresas españolas pretenden tener una proyección internacional, ¿qué reconocimiento externo van a conseguir si ni siquiera cuentan con un dominio «.es»?
