Con mucho optimismo se ha empezado el año en los pasillos de la división informática de Toshiba España. El nuevo director general, Alberto Ruano (recordemos que Xavier Pascual es ahora el máximo responsable de la compañía en la Península Ibérica), se presentaba esta misma mañana de manera oficial a la prensa especializada con un mensaje lleno de energía y buenas expectativas. Ruano comenzaba su presentación haciendo balance de los tres primeros trimestres de 2003, donde la subsidiaria española ha crecido un 66 por ciento en ventas de unidades. El mayor incremento se ha dado en el segmento de portátiles cuyo precio es inferior a los 1.500 euros, apartado de mercado que supone casi el 74 por ciento del total en España. Además, Ruano constataba el hecho de que ha sido el nicho de consumo el que ha tirado del negocio a lo largo del año pasado, con un aumento de las ventas del 80 por ciento en el caso de la firma japonesa, mientras que el profesional incrementó las suyas en un 58.
El canal de distribución y su peso en el negocio de la compañía ocuparon una parte importante de la presentación de Ruano, quien tuvo palabras hacia sus partners llenas de buenas intenciones. Carlos Sánchez fue presentado como nuevo director de canal retail de la compañía. Desde su unidad se gestionarán los contratos directos con cuatro grandes superficies (Carrefour, Fnac, El Corte Inglés y Maya) y todos los distribuidores de electrónica de consumo a través de los mayoristas (ARC, Memory Set, Tech Data, Ingram Micro e Investrónica). Mientras, la red profesional quedará bajo el mando de Emilio Dumas, también atendida por los 5 partners logísticos mayoritariamente salvo los pocos corporate directos que quedan.
Ruano quiso presentar también al resto de responsables (Mariano Montesinos como director de organización y José Antonio Arjona como director técnico) que compondrán una nueva estructura organizativa que busca ante todo la proximidad con el cliente. Queremos crear grupos de trabajo, que una persona de cada departamento (marketing, técnico y comercial) visite al cliente, explicaba.
Toshiba, que continuará identificándose con la movilidad, espera vender 150.000 unidades este año, lo que supondrá un crecimiento del 60 por ciento, si el suministro de fábrica lo permite. Ruano ha reconocido que los 94.000 portátiles vendidos en 2003 podrían haber sido más de no haber sido por esta incidencia. En cuanto a facturación, la compañía cree que volverá a descender también en 2004 por culpa de la caída de precios, que el año pasado fue de un 20 por ciento como media de mercado. Tenemos que reconocer que hemos sufrido mucho por el tema de los precios, sobre todo cuando Infinity System empezó a bajarlos hace dos años hasta los 1.200 euros. De todas formas, no vamos a vendernos por ser número uno. Creceremos siempre en márgenes de rentabilidad.
El objetivo de Toshiba es centrar el 45 por ciento de sus ventas en las áreas de universidades, pymes y organizaciones verticales. En grandes cuentas y administración la firma quiere doblar su presencia hasta que supongan el 15 por ciento del negocio. Por último, Toshiba quiere acrecentar sus ventas en el terreno del consumo con el objetivo de que pase a suponer el 40 por ciento de la facturación.
