Apostar de lleno por la tecnología láser color le ha dado a Oki mejores resultados de los esperados. En este sentido, la filial Ibérica de la compañía, que acaba de hacer públicos los resultados de su ejercicio 2002, finalizado el pasado 31 de marzo, ha cerrado este periodo con un crecimiento en su facturación del 18 por ciento, hasta alcanzar los 88 millones de euros.
De esta cantidad, que, según señala Juan Pedro Pérez, director de marketing de Oki Ibérica «va más allá de las estimaciones más optimistas», el 40 por ciento ha correspondido al segmento de empresa y el 60 por ciento a consumo.
El fabricante, que en el último trimestre de su año fiscal 2002 registró un crecimiento interanual del 353 por ciento en la venta de equipos láser color, ha conseguido situarse en la segunda posición de este mercado en España, con una cuota del 20 por ciento. Este posicionamiento, que le acerca cada vez más al líder, HP, ha hecho que la compañía se plantee el triplicar este año las ventas de máquinas de color, con un mínimo de 24.000 unidades comercializadas y un máximo de 32.000. De hecho, ya en el primer trimestre fiscal ha conseguido vender la mitad del total del negocio del año pasado, gracias al éxito conseguido por las nuevas series C7000 y C9000 y al reciente lanzamiento de la C5000, su gama baja de color.
Oki se ha planteado como estrategia para 2003 seguir apostando de forma importante por el láser color, sobre todo en el entorno profesional y en el mercado SOHO, donde la firma está buscando su sitio. Así, la compañía ya está trabajando en torno a nuevas tecnologías para desarrollar productos más veloces, con mejor calidad y con menor complejidad en su manejo. Asimismo, la firma también apostará por dispositivos que aúnen calidad y precio con vistas a reducir costes en la impresión a color. Para complementar todo esto, Oki prepara el lanzamiento de un nuevo producto que mejorará el posicionamiento del fabricante en este mercado.
Dentro de las monocromo, la compañía ya prepara el lanzamiento para el próximo mes de junio de la serie B6000. Esta familia de impresoras, que sustituirán a la serie B4000, se venderá por un precio que va desde los 889 euros, para el modelo estándar, hasta los 1.299 euros, que alcanzará el dispositivo más completo.
Tras valorar las buenas perspectivas que el segmento de las soluciones de color ofrecía a la compañía, Oki decidió el año pasado desarrollar un canal especializado en la venta de soluciones de color, el de los Oki Color Partners. A día de hoy, este selecto grupo ha dado muchos beneficios a la compañía, por lo que el fabricante ha decidido reforzar su relación con sus distribuidores de color. Así, y dentro de su estrategia para el presente año, la compañía se plantea dotar a su canal de nuevos recursos que permitan a sus socios comerciales mejorar los servicios preventa y posventa en torno a las soluciones de color.
De igual manera, para promocionar el segmento de color, se ha trasladado la campaña «un hombre, una máquina» al usuario final. Esta promoción consiste en que de la mano del canal se hace una demostración in situ de las máquinas en las empresas.
Cabe destacar que hasta el momento, la campaña realizada en el canal ha superado las previsiones iniciales. Así, de los 300 usuarios potenciales que la compañía había estimado, se ha llegado hasta 7.500 empresas. El número de distribuidores y vendedores implicados también ha estado por encima de los planes iniciales: 175 partners frente a los 70 previstos, y 380 vendedores, de los 150 que se fijaron en un principio.


