El futuro del sector de las TI preocupa a todos los agentes que en él participan. Por ello, las consultoras no dejan pasar la oportunidad de aportar algo de luz sobre lo que será y deparará el cambiante mundo de la informática. Por ello Forrester ha realizado un estudio cuya principal conclusión es que en Europa la penetración del PC en el hogar se estabilizará en el año 2005, con un crecimiento medio anual del 7 por ciento. Según Forrester, el número de consumidores propietarios de más de un equipo en sus hogares aumentará un 10 por ciento al año en el próximo lustro, lo que marcará las directrices que seguirá el mercado.
Así, las previsiones de este estudio apuntan a que en 2005, el 61 por ciento de los europeos tendrán, al menos, un ordenador personal en sus casas. Como viene siendo habitual, a la cabeza estarán los países nórdicos, a pesar de que cada vez la distancia tecnológica que separa al norte y al sur del Viejo Continente es menor.
Para analizar la evolución de las ventas de PC en Europa, Forrester ha dividido a los consumidores en cuatro categorías distintas. Así, según esta clasificación, un 23 por ciento de los consumidores son los poseedores de más de un PC. Además, éste será el grupo que más crezca en los próximos años, un 40 por ciento. Por su parte, los consumidores que sólo adquieren un ordenador para reemplazar a otro forman el grupo más estable y constituyen un tercio del mercado. En cuanto a los primerizos, alcanzan una cuota de mercado del 40 por ciento, mientras que en último lugar están los consumidores que no creen necesario invertir en informática.
Pero lo más importante de este estudio son las recomendaciones que hace a fabricantes de PC, mayoristas y distribuidores, a los que aconseja que definan sus ofertas de acuerdo a estos cuatro tipos de demanda. Así, para Forrester, la oferta debe centrarse en configuraciones de PC on line, paquetes modulares de ampliación y periféricos, porque el segmento de consumo que más crecerá en los próximos años es el de los propietarios de más de un PC.
En cuanto al canal retail, éste debe centrar sus esfuerzos en los consumidores que sustituyen un ordenador por otro, intentando que se conviertan en usuarios del primer grupo a través de promociones económicas, una amplia oferta de valor añadido y la difusión de las ventajas de tener un equipo adicional.
Asimismo, los distribuidores no deben perder de vista a los usuarios primerizos, a los que deben concienciar de la necesidad de actualizar constantemente sus equipos, proporcionándoles una oferta personalizada, así como la posibilidad de devolver sus viejos PC en promociones de venta, realizando campañas de marketing. En cuanto al sector más reticente, el de los escépticos a la hora de invertir en informática, 175 millones de europeos actualmente, los minoristas deben esforzarse en convencerles de la necesidad de contar con un ordenador en sus hogares.
Estas actividades ya se están realizando en el mercado español, que no quiere dejar pasar la oportunidad de negocio que se presenta ante ellos. Es el caso de Ei System, que según José Manuel Naranjo, su responsable de comunicación, incentiva constantemente la adquisición de nuevos ordenadores a través de promociones exclusivas, ofertas constantes y bundles de producto. En el mismo caso se encuentra Jump, que, en palabras de su relaciones públicas, Blanca Ribelles, además de realizar ofertas todos los meses, considera fundamental la información. Hay que informar y explicar lo sencillo e intuitivo que resulta el uso del ordenador. Sin embargo es diferente el caso de los compradores de un segundo equipo, pues tienen unas necesidades más avanzadas y el deseo de evolucionar dentro del mundo de la tecnología. Según Naranjo, el ocio, entretenimiento y las aplicaciones profesionales son sus tendencias más acusadas, así como la portabilidad y la miniaturización de los dispositivos.
Todos estos cambios en el mercado del PC afectan directamente al canal de distribución que, según Naranjo, se puede ver afectado por la introducción de Internet como nuevo canal de venta, pero, esto sólo ocurrirá con aquellas empresas que no sean capaces de adaptarse al cambio y asumir este nuevo canal como uno más que ayudará a llegar hasta donde detallistas y distribuidores no habían podido hasta ahora.
El estudio de Forrester no es el primero en constatar el retraso de nuestro país y de los vecinos mediterráneos respecto al resto de Europa en lo que a penetración de ordenadores en el hogar se refiere. Para salvar esta distancia, Blanca Ribelles cree que, a pesar de que las compañías distribuidoras deben estar a disposición del cliente y ofrecer productos de calidad a precios competitivos para facilitar el acceso al mayor número de personas a la informática, lo cierto es que, la educación respecto al uso de ordenadores no es cuestión de las compañías ensambladoras, sino de las instituciones que han de promover dichos conocimientos a través de los centros públicos y facilitar los accesos a la misma.
En este sentido, José Manuel Naranjo considera la formación es fundamental porque poco a poco el público debe mentalizarse de la importancia de estos dispositivos, no sólo para el mundo laboral, sino para el ocio, Internet, etc.


