Han pasado dos aos desde que Telefnica y el Gobierno anunciaran en Espaa la puesta en marcha de servicios de acceso a Internet a travs de banda ancha. Se daba por fin la bienvenida a la introduccin de la tecnologa ADSL y con ella se cumplan los sueos de muchos internautas tarifa plana y navegacin a gran velocidad. Sin embargo, los que recibieron este anuncio con los brazos abiertos pronto se vieron decepcionados por el mal funcionamiento de los servicios ADSL, incluso algunos lo llegaron a calificar como timo. Pero lo cierto es que la verdaderas causas de todos los problemas surgidos bajo el ADSL no han derivado de cuestiones tcnicas sino de barreras administrativas y polticas.
Eternos plazos en su instalacin, cortes y fallos, una velocidad de navegacin lenta y decepcionante y, sobre todo, la aplicacin de unos precios abusivos. Estas han sido las consecuencias de una mala organizacin, una pobre gestin del Ministerio de Ciencia y Tecnologa y la situacin de monopolio ostentado por Telefnica.
Actualmente, y a pesar de la liberacin de las operadoras en 1998, Telefnica sigue siendo la operadora dominante y de los 306.000 usuarios que existen hoy en da de lneas ADSL, ms de 75 por ciento corresponde a clientes de la compaa presidida por Cesar Alierta. Asimismo, si bien es cierto que el nmero de operadoras que ofrecen servicios ADSL es elevado, Telefnica es la nica que posee lneas de bucle local, lo que quiere decir que el resto de compaas (Wanadoo, Eresmas, Jazztel, BT…) son meras intermediarias que compran lneas de banda ancha al por mayor a Telefnica, para venderlos despus a los usuarios.
Esta situacin gener problemas de competencia y oblig a la CMT (Comisin del Mercado de Telecomunicaciones) a intervenir para promover que el resto de las operadoras pudieran lanzar ofertas equiparables a la del operador dominante. As, en junio de este ao el Gobierno estableci que los precios que Telefnica deba de aplicar al resto de las compaas no podan ser superiores al 85 por ciento de lo que cobraba directamente a sus abonados. Con lo que en estos momentos Telefnica vende a los intermediarios el ADSL a 4.000 pesetas al mes y stos a su vez lo pueden ofrecer al precio que estimen, aunque la tarifa media para el cliente final se sita entre las 6.500 y las 7.500 pesetas al mes.
La existencia de intermediarios, que prefieren revender a invertir en nuevas infraestructuras que les permita convertirse en productores, ha contribuido, segn la AI (Asociacin de Internautas), a la creacin de una competencia ficticia que no favorece en ningn momento al usuario, que sigue pagando un coste elevado en el uso de la tecnologa ADSL. Pero hay que tener en cuenta que poseer lneas de alta velocidad requiere de una gran inversin econmica que muchas operadoras no pueden o no estn dispuestas a afrontar.
Las ventajas tecnolgicas del uso de ADSL son indudables y los impedimentos que estn ralentizando su total penetracin en el mercado provienen en gran parte de la mala actuacin que estn teniendo las operadoras que ofrecen una deficiente calidad. Mediante una lnea telefnica convencional (RTB) y un mdem analgico de 56 Kbps se logran velocidades en la recepcin de datos entorno a los 50 Kbps, mientras que con el ADSL se pueden alcanzar hasta 2Mbps de bajada y 300 Kbps de subida. Sin embargo, las compaas limitan la velocidad para poder as establecer distintas tarifas en funcin de la velocidad que el usuario desee contratar. La cuota mnima permite alcanzar velocidades de 256 Kb en la recepcin de datos a 128 Kb en el envo de informacin. Una modalidad intermedia, con capacidades de 512 Kb a 128 Kb, oscila entre las 14.000 y las 16.000 pesetas al mes. Por ltimo para alcanzar velocidades entre 2Mb y 300 Kb le costar al usuario entre 26.000 y 28.000 pesetas al mes, segn la compaa contratada.
Otro de los principales condicionantes en la conexin ADSL es la situacin geogrfica que limita la distancia del abonado a una centralita a unos 4 kilmetros. Esto implica que su aplicacin slo es factible en los grandes centros urbanos y ni siquiera en ellos se puede ofrecer el acceso a toda la poblacin, ya que la instalacin telefnica de que disponga el usuario deber cumplir ciertos requisitos tcnicos que permitan reconvertir el bucle del abonado.
A pesar de que, como hemos visto, la actuacin de las compaas que ofrecen los servicios de alta velocidad es en muchas ocasiones abusivas y de que el Gobierno no promueve planes de actuacin que favorezcan al usuario y, a pesar de que an queda mucha cobertura por cubrir, lo cierto es que esta tecnologa contina su avance. Fuentes de Telefnica afirman que a lo largo del ejercicio 2001 el nmero de pymes que dispone de ADSL se ha multiplicado por 4 dentro de las fronteras espaolas, lo que supone que si a principios de este ao el 5 por ciento de las pequeas empresas de nuestro pas dispona de conexiones de alta velocidad ahora la proporcin se ha incrementado hasta situarse en un 20 por ciento. Y esta cifra se eleva a un 40 por ciento en el caso de las empresas de tamao medio. El ADSL se implantar en todos los hogares y supondr un acercamiento ms real a las tecnologas y oportunidades que ofrece Internet. Su penetracin ser masiva y poco a poco se implantar en todo el canal retail, augura Javier Gmez, country manager para Espaa y Portugal de U.S. Robotics.
En la lucha por acaparar mercado y adquirir un mayor nmero de abonados las operadoras lanzan atractivas ofertas y junto al alta de contratacin regalan el mdem ADSL necesario para la conexin o lo ofrecen a un precio muy inferior al real, que ronda las 30.000 pesetas.
Por el momento parece que 3Com tiene copado el mercado y provee con sus soluciones ADSL a la mayora de las principales operadoras Ya.com, Wanadoo, Arrakis y Telefnica. Por su parte, BT Ignite, que ofrece servicios de alta velocidad a travs de Arrakis, anuncia entre los productos que ofrece el router ADSL 827 de Cisco.
Lgicamente las operadoras se han convertido de esta forma en los mayores clientes de los fabricantes de tecnologa ADSL, que centran sus esfuerzos por trabajar codo con codo con estas empresas de telecomunicaciones. Igualmente, todo aquel fabricante que no disponga de productos homologados por las principales operadoras mundiales perder el tren de este mercado. Para Enrique Ventosa, director de la divisin de redes y telecomunicaciones de Aryan, es lgico que se homologuen estos productos para garantizar la calidad de los mismos.
Una opinin compartida tambin por Javier Gmez de U.S. Robotics Las maravillas que el ADSL puede ofrecer a un usuario no deben verse afectadas por un cuello de botella como la baja calidad de ciertos productos que no ofrezcan ningn tipo de garanta o experiencia en este mercado.
Y en todo este movimiento de acuerdos y alianzas entre fabricantes y operadoras cabe preguntarse si el canal est siendo marginado de este negocio. La respuesta parece ambigua. Desde SMC, Eduardo Garca, country manager para Espaa y Portugal, confirma que su compaa descarta cualquier modelo de venta directa por lo que cualquier acuerdo con las operadoras pasar siempre a travs del canal de distribucin, anuncia.
Este directivo seala tambin que la formacin del canal es baja dado que no encuentran ninguna forma de negocio en el mundo ADSL, solo en instalaciones de cierto nivel pueden optar a ofrecer productos, como routers de alto nivel e integracin en grandes redes.
Parece claro que cuando la lnea ADSL no es suficiente y se demandan soluciones completas y a medida para el acceso a Internet cuando el canal de distribucin encuentra su lugar en este negocio y se hace imprescindible contar con su presencia.
Packard Bell tambin se ha unido al carro de este negocio de conexin de alta velocidad. La divisin de NEC para ordenadores de consumo ha estado ofreciendo durante estas Navidades una tentadora oferta a sus clientes acceso ADSL a Internet con la conexin totalmente gratis, el alta y el mdem.
Espaa an se encuentra por debajo de la media Europea en cuanto a la implantacin del ADSL y muy lejos de alcanzar la penetracin de la que goza EEUU, an as las expectativas de crecimiento son esperanzadoras y Telefnica espera contar en el 2003 con un milln de lneas instaladas.


