OpenAI quiere acelerar su transición para empezar a operar como una empresa tradicional y comenzar a ser rentable cuanto antes, lo que podría suponer el fin de la estrategia todo gratis en su popular servicio ChatGPT. Así se desprende de las últimas informaciones dadas a conocer por la compañía que busca cotizar en Bolsa cuanto antes para conseguir los 1.000 millones de dólares que precisa para seguir desarrollando la IA.
Esta iniciativa permitirá al creador del ChatGPT cotizar en Bolsa y buscar financiación. Y, sobre todo, competir con los gigantes tecnológicos como Google, Amazon o Meta que han anunciado inversiones en el desarrollo de la inteligencia artificial por más de 325.000 millones de dólares. Según El País, la empresa se denominará OpenAI Group PBC y en ella seguirá teniendo un porcentaje importante Microsoft (27% del total).
Nuevas fuentes de ingresos
Como parte del plan a cinco años que ha desarrollado OpenAI, la compañía menciona que diversificará sus fuentes de ingresos con servicios personalizados para empresas y gobiernos, con la monetización de nuevos productos (como herramientas de vídeo o agentes de IA), infraestructura de computación, etc.
Actualmente tan solo un pequeño porcentaje de sus usuarios pagan suscripciones, lo que muestra que todavía la mayoría usa versiones gratuitas o de menor coste. OpenAI está explorando también la introducción de publicidad o un modelo de negocio basado en anuncios para ChatGPT, como parte de su monetización.
Dado que OpenAI quiere rentabilizar más sus productos, puede que en el futuro veamos más funcionalidades “premium” que requieran suscripción, o que la versión gratuita tenga restricciones mayores (por ejemplo, menos accesos, menor velocidad, funcionalidades limitadas).
La versión gratuita probablemente continuará al menos durante un tiempo, porque la estrategia de monetización que mencionan se basa en “ampliar” no en cerrar todas las opciones gratuitas.






