El negocio de servicios de continuidad de negocio, esto es, de anticipación a desastres que afecten a la vida de los datos de una empresa, está creciendo en España al ritmo del 30%, según datos en poder de British Telecom. Sin embargo, no hace falta la constatación de ninguna consultora para apreciar el camino que están tomando todas las grandes operadoras hacia el mundo de las TI. BT es un claro ejemplo. La compañía, que en 2005 se hacía con el mando de Dinsa, integrador corporativo ligado a la firma Banesto, como parte de esta estrategia, quiere hacer ruido en el mundo de los servicios de TI y mostrarse como algo más que un proveedor de líneas de telefonía.
A pesar de que Luis Delgado, responsable de negocio BCS/BRS de BT, hacía hincapié en que la entrada de la firma en el mundo informático se debe principalmente a una petición expresa de sus clientes, el hecho es que el gasto en este tipo de servicios en España previsto para 2006 es de 300 millones de euros. Por esta razón, y porque, según Delgado, la red ha robado al hardware el protagonismo en la infraestructura TIC de las corporaciones, pasando de ser un commodity a un ordenador en sí misma, BT quiere apostar fuerte por este mercado. La compañía cuenta con tres CDP en España, dos en Madrid y uno en Barcelona, que gestionan más de 265 terabytes de almacenamiento en disco. Delgado estima que, como operadora, el valor de BT reside en su capacidad para integrar soluciones de otros operadores junto con las suyas, si es necesario, y en su conocimiento de la conectividad de fibra.
En el último año BT ha invertido seis millones de euros en la adquisición de infraestructuras y profesionales de este mercado. El objetivo de la compañía es facturar más de 2,5 millones de euros en 2006 en este área, mientras que, a largo plazo, la meta es que el negocio represente el 5% de su facturación para 2011.


