Colt ha decidido dar un paso más en su apuesta por diferenciarse del resto de operadoras que prestan su servicio en nuestro país. De esta forma, la compañía de telecomunicaciones e Internet, que en España tiene oficinas en las ciudades de Madrid, Valencia y Barcelona, ha puesto en marcha un ambicioso proceso de reclutamiento de canal.
La operadora, que hasta la fecha ha enfocado mayoritariamente su estrategia hacia la gran cuenta, se ha propuesto atacar el mercado de la pequeña y mediana empresa a través de sus socios comerciales. Concretamente, y según ha explicado Marcos Carmena, director de ventas de canal indirecto, «Colt quiere acceder a todas aquellas compañías que realicen un consumo en telecomunicaciones a partir de 300 euros mes, que valoren un acceso a Internet de alta calidad o que se planteen montar un VPN». Para todo ello, la empresa apostará firmemente por un canal que, compuesto mayoritariamente por integradores y VAR, se ampliará hasta los 45 socios, (35 en la actualidad). En este punto, Carmena ha recalcado como los distribuidores que trabajen con Colt podrán, a diferencia de los que lo hacen con la competencia, comercializar toda la gama de servicios de la operadora (voz, datos, Internet, soluciones e-business, servicios gestionados, etc). Asimismo, estos socios contarán con un apoyo constante en la fase de preventa y en el seguimiento de los proyectos, sin olvidar ambiciosos planes de comisiones e incentivos de los que podrán beneficiarse.
La compañía, que empezó a moldear esta estrategia de canal hace seis meses y que ahora mismo está centrada en la captación y fidelización de socios, espera que al cabo de 2003 los ingresos por venta indirecta lleguen al 15 por ciento.


