  Como suele ser habitual Salvador Cayón, director de marketing del Grupo de Sistemas Personales de HP, aprovechó la presentación de nuevos modelos de portátiles profesionales para ofrecer una breve semblanza del último ejercicio así como de los objetivos para el año en curso. Y su análisis resulta cuanto menos esperanzador. De un descenso global en el mercado del PC cifrado en un 9% -5,4 millones de ordenadores- y unas ventas de equipos similares a las del ejercicio de 2004 –con medio millón de ordenadores menos, en relación al ejercicio anterior-, vamos a pasar a crecimientos del 8% y un número total de 7,8 millones de ordenadores para el año en curso, según estimaciones de IDC.     Ya en este primer arranque del año natural se están observando incrementos del 20% en el área de consumo y las expectativas son más positivas. Su análisis, por cierto, resulta similar al que ofrece Andreu Rodríguez, consejero delegado de Ticnova –dueña de la cadena de tiendas Beep- y que estima que en el negocio doméstico se ha tocado fondo y se empiezan a observar síntomas claros que permitan ver la luz al final del túnel.  
La empresa es otro cantar porque los usuarios se están tomando tiempo para reactivar sus inversiones y la atonía en la actividad compradora continúa siendo la máxima entre los usuarios profesionales. Una prueba de que la cosa va para largo es que IDC predice una actividad casi plana en el mercado empresarial (4%) para el conjunto del ejercicio, en lo que representa un orden de magnitud similar a lo cosechado en 2004. Eso sí, hay activación y una vuelta a los números negros, lo que ya es un logro máxime cuando en el ejercicio precedente el negocio profesional decreció un 24%.
Otra tendencia que se observa tiene relación con la pyme, que representa la parte del león del negocio profesional y que ha comenzado a explorar otros canales alternativos de compra entre los retailersy las operadoras de telecomunicaciones. Y la tendencia es ir a más, como explica el director de marketing de HP PSG, amante de dar cifras pormenorizadas de todos los mercados, según el cual el 30% de la facturación de los retailers procede de ventas a pymes y autónomos.
 
