Como ha hecho en otros negocios, sobre todo en el de la informática personal, Dell también quiere cambiar el statu quo en el ámbito de la fabricación de equipos para controlar el tráfico de Internet, un terreno donde se mueve a sus anchas Cisco.
La compañía de venta directa no está sola; el mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones chino, Huawei, también quiere hincar el diente a este pastel. Por supuesto, la fórmula que utilizarán ambos contrincantes para ganar posiciones será la de ofrecer precios muy competitivos.
Según Reuters, hasta el día de hoy Cisco, una compañía que muchos consideran que vende caro, no ha respondido a esta presión en los precios de conmutadores y routers, y muchos analistas consideran que el impacto de la entrada en escena de Dell y Huawei será mínimo a corto plazo. Sin embargo, la historia puede tener un color distinto si se mira a largo plazo. Para el gigante del networking el precio no es todavía un asunto clave.
Así lo reconoció el CEO de la compañía, John Chambers, en noviembre, justo después de anunciar los resultados de su primer trimestre fiscal. Entre los puntos fuertes de Cisco está la portentosa factura de su I+D, 3.300 millones de dólares al año, una gran base de clientes y las funciones de seguridad y voz añadidas a sus switches.
Desde 2001 Dell vende conmutadores de gama baja de nivel 2, que son los que se instalan para gestionar el tráfico en redes de PC y que suponen dos tercios del negocio mundial de switches, aunque por el momento sólo ha logrado comercializar 100.000 unidades, un uno por ciento del total. No obstante, la firma tejana tiene previsto iniciar en 2003 la fabricación de sistemas de nivel 3, soluciones más sofisticadas dirigidas a la gran cuenta y que dejan un mayor margen comercial.
