Este soporte a Linux se da en todas las líneas de productos PC, ordenadores portátiles, servidores y mainframes. Louis Gerstner, consejero delegado de IBM, afirma que el Gigante Azul apuesta por Linux porque simplifica la informática y la liberaliza de los sistemas operativos propietarios. Linux puede hacer por el negocio de las aplicaciones lo mismo que está haciendo Internet por el networking y las comunicaciones, declara Gerstner. Por su parte, Irving Wladaswsky, vicepresidente de tecnología y estrategia de la compañía, explica que Linux es el sistema más potente en la actualidad dentro de las Tecnologías de la Información, el que desarrollará los servicios IT de próxima generación en el negocio Internet. Pese a esto, la adopción de este sistema operativo en el mercado es todavía lenta. Las empresas se muestran cautelosas y están a la espera de ver cuál es su verdadero potencial, por lo que no han emprendido fuertes compromisos comerciales con esta tecnología.
Linux está avanzando poco a poco en el campo de los ordenadores de sobremesa y varios de sus desarrolladores más recientes le han situado en el promedio de aplicaciones más utilizadas por los usuarios, aunque el sistema alternativo sigue sin constituir una seria amenaza para Windows. KDE (K Desktop Environment), uno de los dos entornos gráficos básicos de usuario para Linux, se acaba de actualizar con la versión 2.0 y grandes de la industria, como Compaq, HP o IBM han mostrado su apoyo a este software creando la Liga KDE, una alianza industrial para promover Linux.
Por otra parte, una de las dificultades con las que se ha topado Linux es que algunas de sus versiones no pueden soportar Pentium 4 porque no identifican el chip y esto está ralentizando su marcha en el mercado. La solución, según directivos de Intel, pasa porque los vendedores de Linux adapten de forma independiente sus sistemas operativos y los hagan compatibles con esta tecnología.


