Al cierre de su ejercicio fiscal 2001, que finalizó el 30 de junio, Microsoft obtuvo unos beneficios de 7.346 millones de dólares (1,4 billones de pesetas), cifra que concuerda con la que pronosticaban los analistas.
La cifra de negocios se elevó a 25.296 millones de pesetas (4,82 billones de pesetas), un 13 por ciento más que en el año 2000.
Microsoft finalizó el último trimestre fiscal con un exiguo beneficio de 66 millones de dólares (12.652 millones de pesetas), cifra que responde a la contabilización de los 2.600 millones de dólares (498.000 millones de pesetas) de pérdidas por amortización de inversiones. Las ventas crecieron un 13 por ciento hasta los 6.577 millones de dólares (1,2 billones de pesetas).
Pese a los buenos resultados, Microsoft ha advertido que en el primer trimestre de su próximo ejercicio (hasta septiembre), no cumplirá las expectativas. La compañía prevé una facturación de entre 6.000 y 6.200 millones de dólares (1,1 y 1,2 billones de pesetas).
Según John Connors, máximo responsable financiero de la compañía, la situación irá a peor. Esperamos otro año de modesto crecimiento, que será uno o dos puntos inferior al del ejercicio que acaba de concluir, afirmó el directivo. Asimismo, Connors advirtió que las ventas de ordenadores también van a caer antes de recuperarse en el 2002.
Nortel se ha visto afectado por la falta de inversión en telecomunicaciones. El fabricante canadiense ha perdido 19.400 millones de dólares en su segundo trimestre (3,6 billones de pesetas), lo que supone un record negativo en la historia de la compañía.
En lo que va de año, la compañía ha despedido a 23.000 personas y tiene intención de eliminar otros 7.000 puestos de trabajo antes de septiembre. Nortel prevé ahorrar con estas acciones un 30 por ciento de sus gastos en salarios.
Por su parte, Ericsson sigue con problemas. El fabricante sueco registró unas perdidas de 1.335 millones de dólares en el segundo trimestre del año (256.000 millones de pesetas), frente a los 954 millones de dólares (182.700 millones de pesetas) de beneficios que obtuvo en el mismo periodo del año 2000.
Asimismo, la firma ha anunciado que suprimirá otros 10.000 puestos de trabajo como parte de un plan para intentar reducir costes y contrarrestar los efectos de la ralentización económica.
