Para el presidente de Santa Bárbara, Manuel Conde, 2002 ha sido un año difícil sobre todo para el segmento mayorista debido al retroceso de la ventas del hardware destinado a las empresas. Dado que las ventas a los usuarios finales de las empresas representaban un gran porcentaje de nuestros ingresos, hemos sufrido bajadas en muchos productos, mientras que otros únicamente se han mantenido gracias a las compras de las administraciones públicas, señala Conde. Por otra parte, el responsable de la firma de Cornellà de Llobregat asegura que las ventas a las tiendas se han mantenido y que, en algunos casos, han crecido. En total hemos crecido en torno al 15 por ciento. Aunque los resultados han estado por debajo de nuestras previsiones, nos sentimos muy satisfechos dado el año que hemos pasado. El presidente de Santa Bárbara cree posible concluir 2003 un crecimiento que se mueva en una horquilla del 5 al 10 por ciento. Este dato no está acabado de perfilar ya que estimamos que la venta de productos para la corporación puede seguir estancada, en tanto que la destinada al mercado de informática de consumo a lo peor tampoco registra incrementos. Por ello, hemos planteado nuestro crecimiento orientándonos hacia lo que son productos de integración para ensamblar ordenadores, desvela Manuel Conde.
A más largo plazo, con el horizonte de 2004 a la vista, la estrategia de Santa Bárbara se concentra en profundizar en una mayor especialización, concentrando la actividad en la venta de tecnologías para la integración, la movilidad, el multimedia, las comunicaciones y las memorias. Además de ello, añade Conde, siempre tratamos de escapar de las grandes marcas y de los grandes productos, que es donde se puede sufrir más la competencia.
Conde subraya la vitalidad del negocio de las memorias, una tecnología que en Santa Bárbara conocen desde sus inicios. Hemos comercializado desde siempre la gama de productos de Kingston, y hemos vendido un volumen importante de memoria específica para ordenadores de marca, pero donde hemos incrementado nuestras ventas de manera considerable ha sido en el apartado de memorias estándar para ensambladores de la marca ValueRam. Para este año el responsable confía en que la evolución de los precios de este componentes no diezme los ingresos esperados de esta línea de producto.
Por lo que respecta a los productos más vendidos en este ámbito, las cámaras digitales, una tecnología en plena expansión, ocupan un lugar destacado. Conde cree que hay una buena oportunidad pues la calidad de las cámaras digitales tiene que ir subiendo paulatinamente a lo largo de este año. Incluso las cámaras digitales de nivel más bajo tienen que ofrecer resoluciones de un megapíxel más, llegando a finales de año a los 2 megapíxels, en tanto que las cámaras profesionales estarán aproximándose a los siete megapíxels. Por otro lado, las cámaras actuales, que se encuentran en el segmento medio, bajarán mucho de precio, lo que permitirá a los usuarios acceder a buenos dispositivos pagando sólo 100 euros. Asimismo, el directivo recuerda que las cámaras digitales provocan incrementos en las ventas de otro tipo de accesorios como memorias, lectores de memoria y sistemas de reproducción e impresión de imágenes digitales.
Aunque inició sus actividades comercializando memorias, el mercado relacionado con el suministro de productos para la integración de ordenadores es uno de los flancos a los que dirige Santa Bárbara su estrategia corporativa desde hace ya dos años, al tiempo que está incrementando los servicios de atención al cliente y logísticos ofrecidos a los retailers. Nos está yendo muy bien en este terreno, en el que partimos de cero, y creemos que tenemos muy buena base para seguir creciendo en los próximos 2003 y 2004. Manuel Conde afirma que las grandes cadenas de consumo consideran los servicios de todo tipo como una actividad que ha de ofrecer el mayorista. Estamos adecuando nuestra estructura cada día para podérselos proporcionar. Los productos de para tienda bien llevados pueden ser productos muy rentables, tanto para el minorista como para el mayorista y el fabricante.
