Esta tarde cerrará sus puertas la octava edición de Medpi Iberia, el encuentro profesional que reúne a fabricantes, mayoristas y distribuidores del mundo minorista. Si se cumplen las previsiones de Reed Exhibitions, los organizadores de esta cita, desde el pasado miércoles hasta hoy en el Instituto Ferial de Vigo (Ifevi) se habrán realizado más de 2.000 entrevistas de negocio con el objetivo de preparar los catálogos para las próximas campañas de vuelta al cole y Navidad. En total, 114 empresas expositoras (las mismas que en Medpi 2005) han desplegado sus propuestas a lo largo y ancho de 1.900 metros cuadrados que han sido rastreados por más de 170 compradores procedentes de unas cien compañías. Los participantes han echado en falta a responsables de compras de Fnac, Alcampo, El Corte Inglés, Eroski y Data Logic. Por el contrario, Menaje del Hogar y Grupo Segesa han acudido por primera vez y otros, como Master Cadena, Miró y Regisa, han repetido la experiencia.
Una vez más, la convergencia electrónica ha acaparado toda la atención de los visitantes. Pantallas de plasma, MP3, MP4 (estándar de compresión para archivos multimedia), teléfonos móviles, conectividad para el hogar digital y un sinfín de ofertas multimedia han campado a sus anchas en Medpi 2006. Aunque este año los reyes indiscutibles de la feria han sido los sistemas de navegación GPS. De hecho, Vivian Federman, directora del encuentro, estima que más del 10% de los expositores han mostrado este producto en su stand. En este mismo sentido, Luis Carlos Bastero, responsable de canal de Viamichelín, confirma que en la feria se ha palpado un “interés desmesurado” por el GPS puesto que es un mercado en pleno crecimiento que tiene ante sí “un recorrido muy largo”.
Así las cosas, Reed Exhibitions cree que el software, que cada vez tiene menor presencia en el encuentro, podría haber acaparado el 18% de las reuniones de trabajo de Medpi 2006, mientras que el 81% restante se habría repartido casi a partes iguales entre imagen y sonido, telefonía e informática.
Por otro lado, este año la organización ha centrado parte de sus esfuerzos en establecer un riguroso control de acceso al reciento ferial. Se buscaba así evitar que visitantes no autorizados aprovecharan Medpi para realizar reuniones improvisadas con los compradores, algo que derivaba en el incumplimiento de las agendas concertadas de antemano por los expositores. De esta forma, cada persona acreditada para el encuentro ha debido confirmar su identidad (mostrando el DNI o un documento similar) cada vez que cruzaba la puerta de entrada a la zona de exposición. Federman reconoce que ha sido un control “muy duro”, pero que ha dado sus frutos, a tenor de las impresiones transmitidas por los participantes. Aun así, Xavier Llopis, director del fabricante español de periféricos Rainbow, afirma que para rentabilizar el tiempo y el dinero a los expositores les conviene entrevistarse con el mayor número posible de gente, por lo que no ve necesario “tantísimo” control. Y es que, según Llopis, en esta edición ha habido mayoristas, distribuidores y otros profesionales del sector retail que no han podido acceder a Medpi por falta de invitación y con los que le hubiera gustado entablar un primer contacto.
Reed Exbitions ya preveía esta situación y para remediarla, durante el primer día, autorizó a 57 partners locales a visitar la feria. Para ello, previamente se les exigió un IAE que justificase que eran pequeños distribuidores o tiendas y no potenciales expositores encubiertos. Según Ferderman, esto ha sido una prueba que se repetirá en próximas convocatorias siempre y cuando los resultados de esta experiencia piloto sean buenos.


