Por Mayra Martínez (Palo Alto, Estados Unidos)
Pocos ámbitos en las tecnologías de la información se enfrentan a tantas dificultades como el de los centros de datos. Muchos están experimentando problemas de capacidad, las viejas instalaciones se quedan pequeñas para almacenar la ingente cantidad de información, mientras que el espacio, los costes energéticos y las necesidades de refrigeración invitan a buscar alternativas capaces de dar soluciones prácticas y flexibles. Según las estadísticas del Instituto sobre Data Centers, Afcom, más de la mitad de los centros de datos existentes en 2010 tendrán que reubicarse o externalizar algunas de sus aplicaciones. De hecho, una encuesta llevada acabo por HP revela que más de un tercio de los CIO creen que de dos a tres años sus centros de datos serán incapaces de responder a la creciente demanda. La firma estadounidense lleva tiempo intentando ofrecer soluciones a estos problemas desde una perspectiva global, unitaria y adaptativa a las necesidades de cada cliente. No obstante, su estrategia no se enfoca en ofrecer soluciones localizadas, si no en dar unos servicios que cubran todos los dominios existentes, desde las instalaciones a la infraestructura, pasando por gestión de las aplicaciones y las operaciones. La idea es que los clientes no sólo consigan ampliar las capacidades y eficiencia de sus centros de datos, sino que logren transformarlos para adaptarse a las demandas actuales de sus negocios. De hecho, esta estrategia ha sido bautizada como ‘Data Centers Transformation’ un paraguas que engloba soluciones y servicios en las áreas clave que liderarán esta transformación: eficiencia energética, automatización, virtualización, consolidación y continuidad de negocio. Todas estas áreas se abordan a través de un conjunto de sistemas de almacenamiento, software y servicios que forman parte del portafolio de HP.
Servicios y soluciones
En el apartado de almacenamiento HP cuenta con la nueva línea de servidores HP Proliant DL785 G5 y soluciones de virtualización para data center que incluyen virualización de servidores, almacenamiento, redes y aplicaciones, a lo que se añaden servicios específicos de diseño, despliegue, soporte y formación en la tecnología. A ellos se suman sus servicios de consolidación para reducir el número de las instalaciones del cliente y con ello los costes energéticos y operativos, y los tres nuevos centros críticos (Mission Critical Facilities) adquiridos en febrero de este año y desde los cuales la compañía ofrece servicios de consultoría. El objetivo es ayudar a los clientes a crear instalaciones escalables que reduzcan los costes de las operaciones del data center a través de sistemas de alimentación y refrigeración más eficientes.
La norteamericana también tiene una oferta de peso en el ámbito de las soluciones de gestión de la infraestructura. Ya desde la adquisición de Mercury, la compañía ha dado signos de su imparable apuesta por este negocio que incluye dentro de su línea Business Tecnology Optimization (BTO) y que, junto con Business Information Optimization (BIO) y Open Call, constituyen los pilares básicos de su división de software. Los últimos años se han caracterizado, de hecho, por la continuación de la apuesta por la línea de negocio de BTO que representa un 80% de sus soluciones de software, sobretodo en lo referente al área de la automatización de las operaciones. La automatización es, de hecho, el nuevo baluarte de la estrategia HP heredera de la última de sus adquisiciones, Opsware, el esfuerzo inversor más importante de HP tras la compra de Mercury, que supuso un desembolso de 1.500 millones de dólares. Toda esta inversión tecnológica se ha materializado en la disponibilidad de un completo set de software y servicios dirigidos a automatizar el ciclo de vida completo de los procesos TI a través de toda la infraestructura tecnológica. Desde automatizar cambios de todos los componentes (entre los que se encuentran automatización de nuevas versiones de software o automatización de cumplimientos de niveles de servicio), a monitorizar todo el estado de la infraestructura TI (con la posibilidad de disponer de métricas basadas en test universales para comprobar los niveles de servicio, así como gráficos sobre la evolución del rendimiento de los servicios), pasando por permitir mover automáticamente las cargas de trabajo entre los recursos tecnológicos ociosos.
Como broche final a esta completa gama de productos y servicios destinados a crear centros de datos de última generación, HP añade la posibilidad de contratar infraestructura como servicio. A través de su ya conocido Adaptitive Infraestructure as Service (AIaaS) HP ofrece la posibilidad de externalizar toda la infraestructura (ya sea Linux, Unix o Windows), así como las aplicaciones del cliente en modo outsourcing, con niveles de calidad de servicio mejorados.
La propia HP ya ha iniciado la transformación de sus propios centros de datos consolidando sus data centres de 85 a 3 pares (3 centros y sus respectivas replicaciones). Con ello la compañía afirma hacer reducido sus gastos operacionales de 4% a un 2%, reducir el consumo de energía en 60% y rebajar a la mitad los costes de red.