El Gobierno acaba de presentar el Plan de Acción XXI para impulsar el desarrollo de la Sociedad de la Información en nuestro país. Con este fin, el Ejecutivo inició hace ya tiempo el Gobierno electrónico, un programa de implantación de servicios y soluciones que facilitan la interacción entre la Administración y los ciudadanos a través de las nuevas tecnologías. El lanzamiento de portales y páginas web en Internet, así como la puesta en marcha de dispositivos CRM (sistemas de gestión de la relación con los clientes), son las últimas iniciativas del Estado para modernizar la Administración Pública.
El Informe Reina, un estudio anual elaborado por la Comisión Interministerial de Adquisiciones de Bienes y Servicios Informáticos (CIABSI), analiza precisamente el estado de las Tecnologías de la Información en los organismos públicos. Los datos ofrecidos en este informe hacen referencia al grado de aplicación de las Nuevas Tecnologías en la Administración central y periférica del Estado, organismos autónomos, entidades gestoras, servicios comunes de la Seguridad Social, empresas públicas y organismos oficiales con régimen específico, quedando excluidas del estudio las universidades, la informática operativa del Ministerio de Defensa y la informática de gestión de los centros escolares. La última edición del Informe Reina, que corresponde a 1999, está editada por el Ministerio de Administraciones Públicas en el Boletín Oficial del Estado y se encuentra disponible en su Web www.map.es.
Según el Informe Reina 2000, la Administración invirtió 109.680 millones de pesetas en 1999 en Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), lo que supuso un crecimiento de 5,5 puntos respecto al año anterior. El Estado ha incrementado significativamente su gasto en informática en los últimos años debido a la necesidad de hacerse con una extensa red de comunicaciones que facilite la atención a los usuarios. El paso de la informática corporativa a la informática distribuida ha provocado que los sistemas abiertos (servidores y PC), tengan un mayor peso en la Administración tanto en hardware como en software, afirma Fidel Carrasco, director de Sector Público de Unisys España, uno de los grandes suministradores tecnológicos del Estado. Las nuevas plataformas Wintel e infraestructuras potentes y seguras para entornos gráficos y ofimática son las soluciones más demandadas por la Administración, añade el directivo de Unisys.
Por su parte, Ángel Suero, director de Sector Público de IBM, otro gran proveedor del Estado, declara que España es pionera en Europa en la adaptación de sus organismos oficiales a la vanguardia tecnológica, proporcionando al ciudadano servicios personalizados en la Red. Lo que mayoritariamente demanda la Administración son soluciones que potencien la interacción electrónica con los ciudadanos. La expansión en Internet es un tema prioritario tanto para la Administración central como para los gobiernos autonómicos y locales y estamos asistiendo a un crecimiento espectacular de la demanda de tecnologías CRM, explica Suero. Según el directivo de IBM, todo esto responde al proceso de reingeniería que ha iniciado la Administración para crear un único punto de contacto con el ciudadano y facilitar al máximo los trámites y las gestiones.
De la cantidad total invertida por el Ejecutivo en tecnología, el mayor gasto recayó en el área de equipamiento, con 36.350 millones de pesetas, y personal, con 35.728 millones, alcanzando cada uno de estos segmentos un 33 por ciento de la inversión global. Le siguieron los servicios, que representaron un 23 por ciento del gasto, situándose en 24.992 millones de pesetas, y por detrás quedó el software, que con 10.310 millones supuso tan sólo el 9 por ciento del total.
La expansión de los presupuestos informáticos del Estado, motivada por la introducción del e-business en los sistemas de los ministerios, ha agudizado la competencia entre los fabricantes de equipos. Así, el primer proveedor en 1999, siguiendo la tendencia de años anteriores, fue Informática El Corte Inglés, que firmó contratos por valor de 6.910 millones de pesetas. A continuación se situaron IBM, con 6.454 millones, Bull, con 5.602, y HP, con 4.573. Entre los integradores nacionales más destacados, además de IECISA, estuvieron Syseca, que cobró un total de 1.533 millones en concepto de servicios, CP Software, dedicado también exclusivamente a la venta de servicios (1.178 millones de pesetas), y APD, que centró su actividad como partner del Gobierno en la venta de hardware y recaudó 1.011 millones de pesetas. Mientras IECISA, HP y Sun basaron todo su potencial en la venta de hardware, IBM se concentró en la oferta de software y servicios y Fujitsu ICL, Syseca, Indra o CP Software se volcaron en el área de servicios. En términos generales, afirma el responsable de Sector Público de IBM en España y Portugal, el presupuesto de la Administración se dirige en un 50 por ciento a servicios y crece la utilización de Linux en los organismos públicos, ya que al estar basado en estándares abiertos favorece la interoperatibilidad entre muy diversas plataformas de hardware. Según Suero, en España, las iniciativas de la Administración están propiciando un alto grado de madurez al mercado. Las medidas liberalizadoras, por ejemplo, han acelerado de forma considerable el uso de tecnologías como el teléfono móvil, añade el directivo.
Por departamentos, los mayores presupuestos correspondieron a los ministerios de Trabajo y Asuntos Sociales y Economía y Hacienda, que destinaron 24.587 y 20.938 millones, respectivamente. Fomento, Interior, Sanidad y Consumo invirtieron una cantidad superior a los 10.000 millones y, por su parte, Presidencia, Asuntos Exteriores e Industria y Energía fueron las carteras que menos gastaron, no llegando ninguna de ellas a los 1.700 millones.
