Durante 2000 fueron 210 las compañías puntocom que se vieron obligadas a cerrar sus puertas, y un 60 por ciento de estos cierres se produjeron, según un estudio realizado por Webmergers.com, entre octubre y diciembre. De las puntocom desaparecidas, aproximadamente la mitad estaban especializadas en comercio electrónico, un 30 por ciento en contenidos y un 20 por ciento en infraestructuras y servicios on line . En Europa Occidental se produjeron más del 11 por ciento de los cierres, mientras que en España, las empresas puntocom han seguido la misma trayectoria que en Estados Unidos, ya que en los últimos meses un gran número de compañías ha cerrado o despedido a parte de su personal para reducir costes. Este es el caso de Ecuality, compañía española de comercio electrónico y propietaria de las tiendas Alcoste y Diversia, que a principios de diciembre presentó suspensión de pagos al no conseguir que Juan Luque, el hombre que los socios mayoritarios habían puesto al frente de la compañía para su reestructuración, llegara a un acuerdo con los acreedores para que aceptaran su plan de viabilidad, que incluía un recorte de más de la mitad de la plantilla y la venta de Diversia.
Otro caso que ha puesto en entredicho hasta qué punto merece la pena arriesgar tanto dinero en un proyecto del que no se sabe si será rentable ha sido el del portal Yupi.com que, el pasado mes de diciembre, cerraba las seis oficinas internacionales que mantenía en todo el mundo y despedía a 180 empleados, 10 de ellos pertenecientes a la filial española, de los 220 que integraban su plantilla mundial. El cierre de todas sus filiales fue consecuencia del fracaso de la operación de venta que estaba a punto de cerrar con el gigante Globo. Otro caso de despido sonado en España fue Baquia.com, portal especializado en dar información sobre Internet perteneciente al Grupo NetJuice, que a principios de diciembre despidió a 23 de sus 63 empleados con el objetivo de recortar gastos y alcanzar la rentabilidad a corto plazo.
Sin embargo, la lista de empresas punto.com que han visto cómo la crisis azotaba sus cuentas de resultados con el consiguiente cierre de las mismas no termina de acabar. El último en sufrir en sus propias carnes la crisis de la era Internet ha sido eToys, compañía especializada en la venta de juguetes online, y que ha clausurado ya su sitio web en el Reino Unido y se espera que haga lo propio con sus operaciones europeas próximamente. Algunos de los ex empleados de eToys han declaran con resignación que, este es el riesgo que se asume cuando se decide comenzar a trabajar para una start up .
Pero las cosas no quedan ahí. Recol, el portal de los colegios profesionales en España, ha sido otra de las víctimas del crash de Internet, y se ha confirmado sus graves problemas financieros. De hecho, diez ex consejeros de la compañía presentaron una demanda civil y penal contra Ignacio Oscáriz, actual consejero de la sociedad, por un presunto uso irregular de fondos y que derivó en problemas de liquidez de dicha sociedad. Recol atraviesa una profunda crisis económica, que podría pasar por una suspensión de pagos, tal y como le ocurrió a Ecuality hace tan sólo unos meses, aunque Oscáriz haya dicho que al final se salvarán de la quiebra. Habrá que esperar qué ocurre en los siguientes meses. A Netfinger parece que las cosas no le van del todo bien. Según fuentes consultadas por PC DEALER, la compañía podría estar desprendiéndose de varios servicios, como el de prensa, por sus problemas de solvencia y estar a la espera de que algún comprador ponga sus ojos en una empresa que tiró la casa por la ventana cuando nació sin pensar que siempre que se pone en marcha un proyecto, el plan de gestión es muy importante.
Ante semejante panorama, las voces de los sindicatos han comenzado a salir, por temor a que esta crisis se prolongue demasiado y deje a miles de personas en la calle sin trabajo. Por ello han lanzado una campaña de apoyo a la Asociación de internautas, con el objetivo de adaptar los derechos sindicales a la nueva realidad que supone Internet, lo que supone una iniciativa hasta ahora impensable en España pero que está tomando forma poco a poco.
Pero los problemas también surgen fuera de las fronteras, y en empresas sólidas, como es el caso de la división en Internet del New York Times, que ha despedido a 69 de sus empleados, un 17 por ciento de su plantilla, tal y como ha anunciado la compañía. Estos despidos van a afectar a todas las actividades en Internet de la empresa, incluida la web NYTimes.com, la edición virtual del prestigioso diario.
A modo de anécdota se puede señalar que otro termómetro de la salud de Internet distinto al mítico Nasdaq es la SuperBowl, el match deportivo por excelencia en Estados Unidos, que ha notado la ausencia de anunciantes de empresas puntocom en comparación con el año pasado, cuando 17 nuevas compañías de Internet se gastaron la cantidad de 44 millones de dólares en marcas deportivas. Sin embargo, las cosas cambian, y este año sólo tres de ellas estarán presentes en tan celebrado acontecimiento deportivo.
El canal de distribución también tiene su particular punto de vista sobre la situación que está viviendo el sector de las puntocom. La mayoría de los mayoristas y distribuidores han compatibilizado los dos métodos de venta, es decir, el tradicional con el electrónico, y de este modo se han cubierto las espaldas de cara a una posible crisis en alguna de ellas. En el caso de Diode, Agustín Alarcón, consejero delegado de la compañía, cree que los mercados están pasando por un momento de incertidumbre y desconfianza y que se está viendo en la penalización que se está aplicando a las empresas de Internet. Se generaron extraordinarias expectativas, con planes muy ambiciosos, que derivaron en enormes valoraciones y una fuerte disposición de recursos financieros, y sus resultados no han estado a la altura de lo esperado. A pesar de esto, desde Diode creen que el e-commerce acabará funcionando, pero no tan pronto como se esperaba y todavía se duda sobre quienes serán los ganadores. En lo que se refiere a la importancia que el negocio tradicional de venta sigue teniendo en España, Alarcón señala que para el consumidor, este modelo seguirá dominando frente al basado en Internet, debido a factores como los costes de las telecomunicaciones, el problema de la seguridad (o el recelo) y la calidad de los servicios logísticos asociados. Otra cosa es el B2B, o negocio entre empresas, donde estos problemas se solucionan de antemano, y esto sí va a ser una alternativa fuerte al modelo tradicional y tardará mucho menos en equilibrarse, agrega Alarcón. De este modo, y relacionado con la confianza que este mayorista tiene hacia estas nuevas formas de comercio electrónico, Diode dispone de una página web para sus clientes que es el principal elemento de su estrategia para el 2001. El desarrollo de las ventas en 2000 a través de este sistema ha sido muy bueno para el mayorista, que espera que siga incrementándose a lo largo del 2001, ya que cuentan con una herramienta de trabajo a disposición de los clientes mediante la cual acaban dándose de alta los dealer, algo que antes hacían por teléfono, ganando así en eficiencia, autonomía, rapidez, seguridad, etcétera. También se pueden consultar sus productos, stocks, precios, presupuestos para sus clientes, configuración de PC a medida, con disponibilidad, configuración de licencias Open de Microsoft, pedidos por la Web, seguimiento de su cuenta como cliente, solicitud de reparación en garantía y consulta a plazos de entrega. En los últimos meses del año 2000, Diode ha recibido operaciones por la Web de hasta 2.500 clientes distintos en un mes, y las ventas han alcanzado el 10 por ciento del total, y se espera que este porcentaje siga subiendo. Solo nos falta que todos los dealers de España se acostumbren a utilizar esta herramienta a diario y veremos como todos nos beneficiamos, concluye Agustín Alarcón, quien, por otro lado, no cree que el e-commerce sea una moda pasajera, sino más bien una realidad que tardará en llegar.
Alberto G. Romero, director de marketing del Grupo Informaster, cree que las expectativas sobre empresas puntocom se convirtió en una burbuja especulativa y se pensaba sólo en obtener beneficios. Para nosotros la mayor parte de las empresas puramente de e-commerce están abocadas al fracaso, especialmente las que realizan B2C, y sólo los portales más fuertes y especializados tienen un futuro menos incierto. Entre los motivos esgrimidos por este mayorista se encuentran la falta de confianza y el gusto existente en España por salir de compras, y del mismo modo considera que el comercio B2B tiene mayor éxito, y en su canal la presencia de una herramienta en el ordenador así como un conocimiento de las Tecnologías de la Información, son fundamentales. En España, la infraestructura telefónica apenas soporta el actual caudal de accesos y los sistemas logísticos aún deben mejorar más, al igual que el porcentaje de ordenadores conectados a la Red todavía es muy bajo. A la hora de valorar hasta qué punto el negocio tradicional impera sobre el electrónico, Alberto Romero cree que los negocios tradicionales que inviertan en Internet serán los que realmente hagan crecer el comercio electrónico en los próximos años, sobre todo los servicios financieros y generales que serán los verdaderos motores de este nuevo negocio. Este mayorista puso hace unos meses en marcha su página Web, desde la que se podía comprar una amplia gama de productos, eso sí, compatibilizándolo con sus métodos de toda la vida . La evolución ha sido paulatina desde nuestro comienzo en 1998. A día de hoy estamos en cotas muy elevadas en comparación a la situación del canal, dado que el porcentaje sobre el total de pedidos ha llegado a superar ya el 20 por ciento, una cifra que algunos de los más grandes del sector tienen fijado como objetivo , señala Romero. Del mismo modo, Informaster quiere incrementar esta cifra de negocio durante los próximos meses gracias a un nuevo sistema de pedido electrónico mucho más sencillo y a otra serie de servicios y aplicaciones que irán implantando durante este año. También tienen previsto implementar una nueva sección para sus ordenadores a la carta y pedidos bajo demanda, así como un panel de control para la petición de listados personalizados, catálogos on line y otros servicios.