El año 2000 hizo tambalear los negocios electrónicos y llevó a la quiebra a más de 200 empresas puntocom. Los problemas registrados en el Nasdaq durante los últimos meses del año dieron al traste con los planes de muchas compañías y paralizaron las inversiones en el mercado.
La primera víctima fue Boo.com, uno de los más importantes e-resellers del continente europeo, que quebró a mediados de año. Más de la mitad de las empresas de Internet desaparecidas se dedicaban al comercio electrónico, un 30 por ciento estaban especializadas en contenidos y un 20 por ciento lo hacía en infraestructuras y servicios on line, según el estudio realizado por Webmergers.com. La crisis, que ha llevado a la suspensión de pagos a una de las empresas de comercio electrónico más representativas de nuestro país, Ecuality, ha cuestionado la viabilidad de muchos de los proyectos en la Red y ha sido el detonante para que las puntocom españolas abandonen la incubación y centren su actividad en la consultoría.
Otros casos de cierre reciente han sido el portal Yupi.com, la tienda virtual LetsbuyIt.com o el establecimiento de Disney Go.com. Por su parte, la prestigiosa Amazon acaba de anunciar 1.300 despidos en EEUU, un 15 por ciento de la plantilla irá a la calle indemnizada con opciones sobre acciones (stock options) tras perder la compañía un total de 545 millones de dólares (96.298 millones de pesetas) en el 2000. con estas medidas, Amazon tiene previsto conseguir beneficios a finales de este ejercicio.. La duda está ahora en saber si con recortes de plantilla se arreglarán las cuentas en un año de desaceleración económica en EEUU y de crisis para los negocios en Internet, ya que, dada la situación, es previsible que las empresas dedicadas al e-commerce, sobre todo B2C, estén abocadas al fracaso y sólo los portales fuertes y especializados tengan un futuro menos incierto.
Pese a la frágil situación de las empresas puntocom durante el 2000, un estudio realizado por Ernst & Young confirma el crecimiento de las compras on line este año. Prueba de ello, es que las pasadas Navidades las ventas por Internet en nuestro país se dispararon gracias a la actitud positiva de los consumidores hacia el comercio electrónico. El total ingresado durante este periodo por las tiendas virtuales ascendió a 16.000 millones de pesetas, 1.000 millones más de lo previsto, según datos ofrecidos por el informe llevado a cabo por la Asociación Española de Comercio Electrónico (AECE) y la consultora Eyeglue.net.
La puntuación que los compradores dieron a las tiendas virtuales es de 3,28 puntos sobre una escala de 5 y el 66 por ciento de los encuestados aseguró estar satisfecho con las compras realizadas, por lo que recomendaría los servicios de la tienda en la que adquirió los productos.
El reciente estudio Global Online Retailing de Ernst & Young desvela que a pesar de las dificultades en el canal de distribución on line y las precauciones de los inversores en este medio, los consumidores internautas se muestran satisfechos con los servicios a través de la Red. Los 4.400 compradores on line encuestados en 12 países, entre ellos España, declaran que cada vez gastan más por Internet y adquieren nuevas gamas de productos. Entre las conclusiones principales de este informe destaca que la clave del éxito para los negocios en Internet es la estrategia multicanal, es decir, para los comerciantes y fabricantes que ofrecen productos de consumo on line es fundamental mantener varios canales de venta para llegar al usuario final (tiendas tradicionales, página web o venta telefónica). En este estudio se observa que los consumidores tradicionales están adoptando poco a poco los hábitos de consumo a través de la Red y que, por tanto, lo que quieren comprar en una tienda virtual es lo mismo que solicitan en las tiendas físicas, con la misma calidad, diversidad y precios.
Un 84 por ciento aseguró que la inutilización de este sistema de compra se debe a la inseguridad en el pago, mientras que el 70 por ciento argumentó que prefiere ver y tocar los productos antes de comprarlos.
La mayoría del gasto en Internet en nuestro país se encuentra en productos informáticos, libros, CD y reservas (viajes, hoteles, restaurantes, espectáculos, etc.). Le siguen los juguetes, cosméticos y artículos deportivos, que acaparan el 23 por ciento de las compras realizadas por los encuestados, las operaciones financieras, con un 21 por ciento, y la compra de ropa, que representa un 12 por ciento. Dentro de estas categorías, los consumidores esperan encontrar en la Red los productos más baratos que en las tiendas tradicionales o en la venta por catálogo y son precisamente el precio, la seguridad en la transacción y los costes de envío las principales causas de descontento en las adquisiciones on line.
