En el aire estaba la catástrofe terrorista de Estados Unidos, pero Magirus sacó fuerzas para presentar a la prensa europea y a parte de su personal en todo el continente su nuevo centro logístico y de integración de Estrasburgo, al noreste de Francia. Las instalaciones han costado a Magirus algo más de 2.100 millones de pesetas y tienen una superficie de 12.000 metros cuadrados. En total van a ser 40 las personas que desde Estrasburgo se encargarán, cuando el centro esté al cien por cien, de organizar la logística del almacén, dar soporte a los clientes, formar a los partners que lo deseen e integrar, según pedido, los grandes sistemas de Compaq, HP e IBM, añadiendo, si es preciso, el software de proveedores como Oracle o Software AG. En opinión de Fabian von Kuenheimn, presidente de Magirus, la nueva ubicación del almacén de la compañía, que mantiene a su equipo de ventas y marketing, así como a su dirección, en Stuttgart, está rodeada por buenas infraestructuras y se encuentra muy cerca de las principales autopistas de Centroeuropa. Además, según el directivo, se mejora notablemente el acceso a Italia. Desde Estrasburgo Magirus cubrirá los suministros a todos los países europeos en los que opera, aunque España y Dinamarca, por su lejanía, será los que menos notarán el cambio. El almacén, de 12 metros de altura y 3.500 metros cuadrados, ofrece sitio para 4.500 palés y tiene aproximadamente 15.000 compartimentos de estacionamiento. Por su parte, el centro de integración, verdadera apuesta en el ámbito de los servicios del mayorista, tiene más de 1.000 metros cuadrados.
Antonio Herrero, director general de Magirus en España, estuvo presente en la inauguración del edificio y reveló que la subsidiaria espera para su primer año fiscal completo en este país, que va de abril a marzo, unos ingresos totales de 2.500 millones de pesetas. Además, en el periodo tendrá lugar la apertura de la oficina de Barcelona y la puesta en marcha de un bundle que compaginará las tecnologías de Compaq y Oracle.
Por otra parte, Herrero se mostró cauto sobre el futuro de HP y Compaq. Sin embargo, señaló que si la operación sigue adelante, van a desaparecer agentes a todos los niveles en el canal, y no sólo en el ámbito de los mayoristas. Herrero afirmó que Magirus no tiene por qué temer nada porque su dedicación a los servicios de valor añadido lo convierten en una opción interesante para ambos fabricantes.


