Microsoft ha comenzado a materializar su apuesta por atender de forma más especializada el mercado de la pyme y ha anunciado nuevas iniciativas dirigidas a promover la adquisición y regularización de software entre este colectivo empresarial.
Entre las acciones más significativas de las presentadas para el canal de distribución destaca el lanzamiento del programa Universidad Tecnológica, una iniciativa que persigue cualificar a los distribuidores especializados en la pyme a través de seminarios y cursos que se impartirán de forma independiente al programa Acceso Directo.
Los partners también jugarán un papel destacado actuando como interlocutores a los que se podrá solicitar información acerca del programa de subvenciones para la empresa puesto en marcha por Microsoft en colaboración con la empresa Econet.
Dentro de este plan global no podía olvidarse la lucha contra la piratería, teniendo en cuenta, además, que la comunidad de pequeñas y medianas empresas es el colectivo con mayor índice de copia ilegal de software. Además, según datos aportados por José Manuel Fernández, responsable de las acciones antipiratería de Microsoft, el 82 por ciento de las pymes utilizan plataformas obsoletas basadas en anteriores versiones de Windows y MS-DOS, un 36 por ciento de las mismas no utilizan tecnologías de la información para su gestión y menos del 10 por ciento utilizan Microsoft Office original.
Para incentivar la compra legal dentro de todas estas organizaciones, Microsoft está impulsando el nuevo Certificado AENOR de Gestión de Software Original que avala la gestión de las empresas comprometidas con el respeto a la propiedad intelectual y los derechos asociados al software. Los beneficios tangibles de la obtención de este certificado -que ha sido recientemente integrado dentro de la lista de calidad de AENOR- se enumeran a continuación y que son
· La empresa podrá utilizar este certificado con fines comerciales demostrando así ante terceros su seriedad y respeto a la propiedad intelectual y a los derechos de los productores de software.
· Dispondrá de un medio para acreditar que actúa de forma diligente lo que le permitirá, en caso de reclamación judicial, limitar su responsabilidad civil derivada de actos aislados de sus empleados.
· Limitará su responsabilidad penal al demostrar no existe dolo, puesto que cuenta con una política de control interno.
· BSA lo considerará en sus actuaciones judiciales mientras el certificado esté vigente.
· Las empresa mejorarán la racionalización de su gestión de software.
