La primera de ellas, denominada Open Simple está dirigida hacia la pequeña y mediana empresa, y consiste en que cada vez que se realiza un pedido concreto no se tienen que acumular puntos para obtener descuentos, algo que suponía un obstáculo para el canal de distribución a la hora de configurar las ofertas más idóneas. Para iniciar esta oferta, existe un requerimiento de compra mínimo de cinco licencias.
El segundo de los componentes del programa se denomina Open de Volumen y es una solución estructurada para clientes dispuestos a comprometerse por adelantado a un mayor número de adquisiciones de licencias. En este caso, se mantiene una estructura de tres grupos de productos diferentes (aplicaciones, sistemas y servidores) y se sigue asignando un valor en puntos a cada producto, de forma que para que cada grupo de software es necesario tener un acuerdo de licencias distinto.
En este nuevo sistema de licencias Open, el mayorista ofrece un alto valor añadido, ya que se encargará de difundir al distribuidor las novedades, y sobre todo, les hará ver que esta simplificación se ha hecho en beneficio de ellos, por lo que el número de distribuidores que se suban al carro de Open se incrementará considerablemente.
