Oki da el empuje final al color en entornos de oficina

La firma desarrolla una nueva línea de producto, la serie C9000 de impresoras de color a alta velocidad.

Publicado el 20 Abr 2001

Oki Systems continúa con su apuesta por el color en el entorno de la oficina. Y lo demuestra con el lanzamiento de una nueva línea de producto, la C9000, aunque para Javier Toledo, consejero delegado de Oki Systems Ibérica, se trata de mucho más que de una máquina. Es un concepto que permite desarrollar una oferta nueva de producto que va a crear, sin duda, demanda.

Según Toledo los estudios demuestran que el manejo de papel no ha bajado, sino que ha subido. Asimismo, alude a que la entrada en escena del color, provocará un incremento en el uso del papel en la oficina. Para ello, dos elementos son fundamentales la velocidad y el precio.

Se trata de una apuesta que no es nueva para Oki y que llevó a la compañía a dejar el segmento de la impresión de chorro de tinta y dedicarse únicamente al mercado profesional. Esta postura no deja de ser arriesgada, pues supone la ausencia de Oki de aproximadamente un 85 por ciento del mercado, lo que no ha sido óbice para que durante 2000, la filial española consiguiera una facturación de aproximadamente 10.000 millones de pesetas. Para este año, Toledo espera que la facturación ronde los 10.800 millones de pesetas y que en el próximo ejercicio se encuentre en torno a los 11.500.
La Serie C9000 es la última gama de impresoras Led color de alta velocidad lanzada por Oki y que continúa con la campaña The Colour of Business. Esta línea completa el lanzamiento de la Serie C7000, que fue presentada en noviembre en toda Europa. Sobre la base de la Serie C7000, la nueva familia amplía sus capacidades proporcionando impresiones de alta calidad a 1.200 x 1.200 puntos por pulgada reales en formato A3+ y con una velocidad de hasta 21 páginas por minuto en color y de 26 en modo monocromo.

La gama está compuesta por cuatro modelos que incorporan el sistema Led Single Pass Digital Color, una tecnología propietaria de Oki gracias a la que pueden imprimir cada página de una sola pasada. Además, incorpora un proceso de calibrado automático del color introducido con la gama C9000, que asegura, según la compañía, un registro preciso del color.

Estas impresoras se dirigen especialmente a empresas que necesitan producir carteles, folletos, esquemas o simplemente documentos con gráficos e imágenes a color. Para ello, también ofrecen la posibilidad de imprimir en formato A3 y A3+ para trabajos como planos, proyectos, etc. En este modo, tienen una velocidad de hasta 11 páginas por minuto a color y 14 en monocromo.

La Serie C9000 está disponible tanto en red como en Internet, por lo que se adapta a equipos de trabajo medios y grandes, pues se integran fácilmente en el entorno de trabajo, tanto como impresoras estándar, como conectadas a una red de trabajo mediante una tarjeta interna Ethernet 10/100 Base TX.

Estas impresoras, según el fabricante, no afectan a la capa de ozono, están certificadas Energy Star EPA y sus principales componentes están marcados para su reciclado.

Cada uno de estos modelos incluye una interfaz paralela bidireccional IEEE 1284 y una conexión estándar USB 1.1. Además, permiten un entorno de trabajo multifuncional, desde Windows a Macintosh, pasando por Linux, Unix, etc.

En cuanto a su memoria, va desde 128 a 320 Mb, aunque es ampliable en todos los modelos hasta 1.024 Mb. Disponen de un procesador Power PC de 400/480 MHz a 64 bits, lo que proporciona un proceso más rápido de datos complejos.
Uno de los objetivos de la compañía para este 2001 es convertirse en la empresa líder en el mercado de impresión a color y para ello también necesita la ayuda de su canal de distribución.

Con Oki Colour Partner, el fabricante japonés certificará a los distribuidores que se dediquen a la comercialización de este tipo de productos, quedando el canal mayorista fuera de este negocio, que, aunque sí podrá adquirir estas máquinas, no contará con los beneficios del programa, tales como la prioridad en las promociones de la gama o condiciones especiales de precio para las máquinas de demo, formación de producto y apoyo comercial de la fuerza de ventas.

Así, la compañía pretende captar distribuidores especializados en la venta de máquinas de color, aunque también participarán en esta iniciativa los Centros Profesionales Oki que reúnan las condiciones necesarias para ello, es decir, experiencia en el mercado de color profesional, conocimiento sobre conectividad y redes, un servicio técnico propio para ofrecer mantenimiento posterior y tener la opción de vender directamente al usuario final. En cuanto a los requisitos de volumen de compra, estos son de dos equipos al mes o seis al trimestre, como mínimo.

De todos modos, Toledo continúa describiendo que la compañía completará sus acciones con actividades de explicación de las posibilidades que tiene el producto, de renovación de productos antiguos, de estudio del coste de impresión de la empresa y demostración de hasta qué punto hay un ahorro con este producto.

¿Qué te ha parecido este artículo?

Tu opinión es importante para nosotros.

Artículos relacionados