Cuatro botones ubicados en su frontal dan acceso al OSD de esta pantalla de 17,1 pulgadas, dos de ellos para navegar por los diversos parámetros y variar sus valores y otros dos destinados a operaciones de selección y escapes. Un quinto pulsador permite al usuario configurar la geometría de la imagen, mientras que el que se emplea para deseleccionar el OSD cuando está activo tiene también la propiedad de conmutar entre las dos señales de entrada que dispone.
La definición de los gráficos se beneficia de una dimensión del punto de 0,264 mm. Por otro lado, esta TFT ha conseguido resultados bastante notables en el apartado de la formación de los colores, que se muestran vivos y puros y homogéneamente distribuidos por la pantalla. La palma, en fin, corresponde a los apartados de brillo y contraste, con resultados verdaderamente notables.
