El comienzo de año es época de ferias. En enero, en el CES de Las Vegas, ya se pudo ver lo que marcará tendencia en el mundo del consumo, con la presencia estelar de las tabletas. En febrero, el Mobile World Congress de Barcelona, que batió records de participación y que volvió a acaparar los focos de la prensa mundial, también llevó al primer plano a las pizarras. Este año se habló poco en la Ciudad Condal de los smartphones, que son los que más atención suelen atraer allí. Apple, que está demorando la salida de la segunda versión de su iPad (empiezan a correr ríos de tinta sobre el ingenio y sobre la salud de su promotor), tiene competidores hasta debajo de las piedras. Primeras marcas como Samsung, Motorola, RIM, Asus, LG o HTC ya han movido ficha. También lo ha hecho, aunque sin ruido, HP, que al fin ha desvelado su propuesta con WebOS. Pero no queda ahí la cosa. En otra feria, la de Distree XXL, mucho más modesta, pero muy interesante para el canal de consumo europeo (congregó a profesionales de 400 mayoristas de todo el continente), se pudieron ver también muchas tabletas, aunque de marcas B. La estabilidad que da a estos sistemas Android 2.1, la versión del sistema operativo más instalada, unido a las posibilidades que tienen estos fabricantes en cuanto a componentes (hay muchos micros y muchos acabados de pantalla disponibles) están permitiendo que el mercado desarrolle tabletas casi para cualquier tipo de usuario y bolsillo. En Monte Carlo se pudieron ver aparatos desde 150 euros. Curiosamente, todos los que intentaban encontrar mayorista en la ciudad de los Grimaldi para sus tabletas low-cost invariablemente llevaban en la cartera un iPad. ¿Por qué será? A la manzana le salen muchos competidores, pero sigue conquistando corazones.
Juan Cabrera
Juan Cabrera tiene más de 20 años de especialización en el sector tecnológico y sobre todo en el canal de distribución. También ha colaborado con otros medios y promociona siempre que puede la buena literatura, la música y la vida saludable.
