Tras terminar la carrera de Publicidad y Relaciones Públicas, Eric Nikolic (26 años) entró en contacto con el sector de la hostelería participando en el proyecto de dark kitchens, o cocinas pensadas solo para el reparto a casa, de la empresa Glovo. Su paso por Glovo le dio una visión de lo que ocurría en este sector y de las carencias de los restaurantes a nivel tecnológico. Y eso fue lo que lo llevó a fundar Last.app, que ahora tiene la intención de revolucionar el mundo hostelero con una solución todo-en-uno pensada para ahorrar a los establecimientos el dolor de cabeza de lidiar con múltiples programas de software, muchas veces incompatibles entre sí.
Last.app nació con la pandemia y debutó a finales de 2021 con la intención de “revolucionar el sector hostelero”. ¿Por qué? ¿Qué carencias encontraron en la digitalización de este sector?
Los restaurantes son negocios realmente complejos, y no solo porque manejan tiempos operativos muy reducidos. Si bien son empresas que de buenas a primeras nadie considera “tecnológicas”, la realidad es otra. Y es que utilizan más de 10 herramientas para la gestión de su establecimiento.
El problema es que la mayoría de estas herramientas no están conectadas, la información queda fragmentada, y el equipo humano se ve obligado a gestionar diferentes herramientas (catálogos, promociones, bases de datos…) por separado.
Esto se traduce en que un restaurante ha de invertir más tiempo en la gestión tecnológica que en lo que realmente importa, y todo para finalmente no terminar con una visión global y realista de su negocio. En resumen, la carencia que vimos fue la de que la tecnología no simplifica la gestión de los restaurantes, sino que más bien la dificulta.
¿No cree que para ser España un país que vive mucho del turismo y la hostelería, por lo general las empresas de este sector tienen unos estándares de servicio no muy exigentes?
Con más de 277.500 establecimientos dedicados a la gastronomía, es difícil hablar de un estándar de servicio homogéneo. Desde nuestra honesta perspectiva, es un sector que se ha visto obligado a profesionalizarse en diferentes aspectos de manera continua. Y, si bien siempre hay niveles, están haciendo un gran trabajo para mantener altos estándares.
Evidentemente, estos dependerán de factores como su posición geográfica, especializaciones e incluso detalles como la tipología del servicio, pero creemos que, con tanta competencia, cada vez más se diferencian a través de la marca, el servicio y un valor añadido creciente.
Una de sus máximas es que ofrece en una única plataforma todo lo que un restaurante necesita para ser gestionado. Para ello, su software se integra con múltiples plataformas de reparto y herramientas de e-commerce, entre otras cosas… Yendo al detalle, ¿qué permite hacer esta plataforma a sus clientes?
Gestionar su negocio, al completo, en una única plataforma. Esto se traduce en muchos aspectos diferenciadores que incluyen: reducir notablemente las tareas manuales operativas (copiado de datos, cruce de reportes, tratar con diferentes proveedores…); elevar la experiencia del cliente (detectamos la saturación en tiempo real y pausamos servicios automáticamente, identificamos el cliente desde cualquier fuente…); y generar un apoyo estratégico para el restaurante (puede crear reportes personalizados con los datos de cualquier servicio conectado, reduce costes…).
“Ya estamos procesando por encima de un millón de pedidos al mes para todos nuestros usuarios”
¿Cómo está evolucionando la compañía? ¿Qué objetivos de negocio y de captación de clientes tiene a medio plazo? He visto que ya tiene algunas importantes cadenas de restauración y que ha atraído a business angels.
Last.app se creó hace unos tres años. El primer año y medio estuvimos enfocados en el desarrollo del producto, y fue entonces cuando empezamos a comercializarlo. Desde entonces ha evolucionado muchísimo, y ya estamos en más de 200 ciudades en España y procesando por encima de un millón de pedidos al mes para todos nuestros usuarios. Y una enorme parte lo hemos conseguido sin inversión en marketing, en base a las recomendaciones de nuestros clientes.
Nuestro objetivo a medio plazo es el de crecer agresivamente en España a través de, ahora sí, inversión en marketing y un equipo de ventas más grande. Hemos cerrado en enero una ronda de 2,5 millones de euros que nos ayudará a convertir esos planes y objetivos en una realidad.
Como usted dice, con Last.app ha funcionado mucho el boca-oreja. ¿Cómo es esto? ¿No han hecho siquiera marketing digital?
¡Completamente! Ha sido un efecto muy sorprendente, pero muy agradecido. La mayoría de nuestros productos core son difíciles de comercializar desde un punto de vista viral o impulsivo. Sin embargo, la necesidad que cubrimos era tan clara que los restaurantes compartían nuestra solución con contactos y compañeros del sector de manera continua.
Si bien entonces no hacíamos casi marketing digital, esto ha cambiado ahora que queremos potenciar un crecimiento a nivel nacional más agresivo con ayuda de la robustez a la que ha llegado el producto, y los fondos que hemos levantado recientemente. Por eso que estamos construyendo un equipo de marketing que pueda ejecutar esos esfuerzos.
Háblenos brevemente de una implantación importante de Last.app hasta la fecha en el sector de la hostelería.
PadThaiWok es un buen ejemplo de este último año. Esta famosa cadena tailandesa, con más de 50 restaurantes, decidió migrar todos sus sistemas a nuestra plataforma. Utilizan nuestro sistema TPV, junto con el agregador de delivery y el servicio de tienda online, contando así con una visión unificada y global de todos sus establecimientos de manera muy ordenada. Esta gran cadena ha crecido notablemente, y se propone seguir haciéndolo de manera muy acelerada en los próximos años. Tanto que han abierto su primera ubicación en Alemania.
¿Tienen en mente salir de España?
Sin duda alguna es un reto que queremos abordar cuanto antes. Sin embargo, tenemos que ser estratégicos con los tiempos, dado que supone replicar gran número de nuestros departamentos, y queremos asegurarnos de que no desviamos recursos dedicados a nuestro principal país en el proceso.
Dicho eso, gracias a acompañar a algunas de nuestras cadenas, ya estamos en países como Andorra o Alemania, pero no tenemos presencia comercial en estos de momento.
¿Cuántos empleados tiene Last.app y cuántos se dedican al desarrollo y la integración de su software con terceros?
Contamos con un equipo de alrededor de 30 personas, y prácticamente un tercio de este se dedica al desarrollo de producto y de integraciones con terceros. Para nosotros, el producto y la usabilidad de nuestro sistema es una prioridad. Es por eso que mantenemos siempre un compromiso fuerte en relación a los recursos que dedicamos a este apartado y departamento.
“Salir de España es un reto que queremos abordar cuanto antes. Sin embargo, tenemos que ser estratégicos con los tiempos”
Su software está ya muy integrado, pero entiendo que todavía hay muchas integraciones pendientes. ¿En qué están trabajando ahora en este sentido?
Lo cierto es que las integraciones son un trabajo continuo, que no tiene un punto final. Para poder posicionarnos como la solución todo-en-uno que los restaurantes necesitan, es de vital importancia estar conectados con todas las herramientas necesarias para la buena operativa de un restaurante, y eso significa también todas las nuevas que entran en el mercado.
Además, esto no se limita a plataformas de software como gestión de stock, empleados, KDS o más, sino a hardware como cajones de efectivo inteligentes o lectores de tarjetas.
Uno de los aspectos que más trabajamos es la documentación de nuestra API abierta de desarrollo. Esto permite a las plataformas que quieran integrarse con nosotros hacerlo de manera autónoma y en poco tiempo, lo que es una gran ventaja para ambas partes.
Y en el desarrollo concreto de su plataforma, ¿cuáles van a ser los próximos pasos?
Nuestro foco es siempre el de herramientas que estén en contacto con el cliente: TPV, Integrador de delivery, tienda online, sistema de reservas… Es donde más valor aportamos, dado que los conceptos que se comparten en el ecosistema (clientes, catálogos, promociones…) están realmente conectados.
Dentro de esa coyuntura, algunos de los próximos pasos que nos planteamos a nivel de producto son sistemas para apoyar y mejorar los procesos de pagos en el restaurante y la comunicación con los clientes a través de nuevas herramientas de marketing y canales de comunicación.
¿A qué se dedicaba usted antes de iniciar este proyecto?
Tras terminar mi carrera de Publicidad y Relaciones Públicas, y justo antes de empezar con Last.app, estaba en el proyecto de Dark Kitchens o cocinas de solo delivery de la empresa Glovo. Además de haber tenido siempre interés por los restaurantes, fue uno de los roles que me dio mejor visión sobre lo que ocurría en el sector.
De igual manera, antes de este rol siempre había tenido el interés de crear y llevar proyectos propios, incluyendo un blog de Android, un servicio de chat, e incluso una tienda online de complementos para fiestas.
¿Qué supone ganar recientemente el reto ViveXXI en los premios EmprendeXXI, impulsados por CaixaBank?
Se agradece mucho poder tener el reconocimiento de empresas como CaixaBank. Si bien no hay mejor premio que el de seguir creciendo y sabiendo que nuestros clientes confían día a día en nosotros, se agradece enormemente contar con espacios como los premios EmprendeXXI, que actúan de expositor y dan más visibilidad al trabajo que hacemos desde Last.app para simplificar el día a día de los restaurantes a través de la tecnología.
