A pesar de todo las pymes españolas mantienen el optimismo. A pesar de la guerra en Ucrania, de los problemas en las cadenas de distribución globables, de la inflación o de la subida de tipos de interés. Así lo demuestra un estudio de Sage realizado a un millar de pequeñas y medianas compañías de este país, y a casi 12.000 pymes de todo el mundo.
El estudio anual ‘Small business, great opportunities’ revela que, pese al aumento de los costes y la presión sobre los ingresos de 2022, las pymes españolas se muestran ahora notablemente más optimistas sobre sus perspectivas de éxito respecto a lo expresado el año anterior.
Además, España se sitúa entre los países con la tasa de confianza más alta, con más de un tercio (39%) de las pymes afirmando que se sienten “muy seguras” del éxito de su negocio durante 2023, frente al 34% a nivel mundial. Un giro radical, dado que los resultados de 2022 situaban a los empresarios españoles como los menos confiados a nivel mundial en el éxito de sus negocios.
Más de una quinta parte (23%) de las pequeñas compañías espera una disminución en sus costes, mientras que el 43% de las pymes españolas augura un aumento en sus ingresos, y cerca de la mitad (42%) prevé aumentar su plantilla.
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El problema del aumento de costes para las pymes
El 26% de las empresas españolas encuestadas admiten que ha habido un aumento de costes y los problemas de liquidez como los principales factores que han impactado de forma negativa en su negocio en el último año. De hecho, más del 70% de las empresas españolas vieron como sus costes aumentaron en 2022. Un problema que sufren más las pymes españolas y portuguesas que sus homologas europeas, y que también genera más preocupación.
El número de responsables de pymes que declara estar significativamente preocupados por el aumento de los costes de cara al próximo año casi dobla a los resultados globales, un 15% en el caso de España frente al 8% global.
A pesar de ello, las pequeñas y medianas empresas españolas afrontan con optimismo el próximo año y se muestran resilientes frente a la adversidad, gracias a adoptar medidas como la reducción de costes (31%), mejorar la productividad (26%), y añadir nuevos productos y servicios a su oferta (23%).
Las pymes seguirán apostando por la tecnología
Otro aspecto clave para que las pymes se adapten y mejoren su productividad es el uso de tecnología, algo que tienen claro las compañías españolas, ya que más de la mitad (55%) tiene previsto aumentar su inversión en tecnología en 2023. De cara a los próximos tres años, las pymes españolas prevén desplegar tecnologías emergentes como 5G (29%), inteligencia artificial (21%) y Blockchain (18%). A pesar de esto, las pymes españolas también identifican la falta de presupuesto y la falta de conocimientos para identificar las mejores opciones como algunas de las barreras para invertir en tecnología.
La pymes avanzan sin planes formales de negocio
A pesar de las dificultades que afrontan, las pequeñas y medianas empresas en España se sitúan a la cabeza en optimismo y confianza, ya que alcanzan el mayor porcentaje de entre todos los países encuestados en cuando a sus objetivos de crecimiento. Un 59% de las pymes españolas aspiran a aumentar sus ingresos entre un 10% y un 40% en los próximos 10 años, frente al 48% a nivel mundial. Sin embargo, solo un 17% aseguran contar con un plan formal de crecimiento que se analiza y actualiza periódicamente, ya sea mensual o trimestralmente, frente al 49% que cuenta con planes informales o directamente no cuenta con planes de crecimiento.
Otro aspecto diferenciador del optimismo de las pymes españolas es que se posicionan como las más satisfechas a nivel mundial en relación a su tasa de productividad, con un 39% muy satisfechas, en comparación al 28% global. De hecho, el 33% de las pymes españolas afirman que aumentar la productividad y trabajar de forma más eficiente contribuye a aumentar la confianza en el éxito de su empresa.
Las españolas son también las más satisfechas de todo el mundo con su capacidad para realizar y recibir pagos de clientes y proveedores, con un 36% de satisfacción frente al 30% global y superan la media en aspectos como su capacidad para trabajar con proveedores, entender a sus clientes, gestionar costes o crear su imagen de marca y reputación.
“Es cierto que somos diferentes y que, frente a las dificultades no nos rendimos, apostamos por la resiliencia y hacemos lo necesario para seguir adelante.
Pero no hay que confundir el optimismo y la confianza con ser invencibles. Para apoyar el éxito en el futuro, tanto las administraciones, como la empresa pública y la iniciativa privada, deben incentivar y apoyar la inversión digital de las pymes mediante inversiones y legislación para que las empresas de España y de todo el mundo puedan implementar procesos de digitalización que les permitan salir adelante”, comenta José Luis Martín Zabala, director general de Sage en España y Portugal.
Por su parte Josep Obiols, CEO de Control Group, partner de Sage, destaca que es “muy importante mantener el optimismo y la capacidad de crecerse ante la adversidad”. “Pero esta actitud, que nos permitirá afrontar la senda del éxito, debe acompañarse de las herramientas y apoyos necesarios para canalizar ese enfoque positivo”.