En los últimos años, de forma lenta, pero inexorable, los grandes retailers van cambiando poco a poco los polígonos y centros comerciales de la periferia por los cascos urbanos. Uno de ellos es Worten, que ha inaugurado en Madrid una tienda de 900 metros cuadrados en dos plantas. Concretamente, lo ha hecho en el número 189 de la calle Bravo Murillo.
La combinación de estructuras urbanas, un diseño vanguardista y la presencia constante de elementos innovadores en el establecimiento de Bravo Murillo sigue el estilo que las tiendas Worten Sant Antoni, en Barcelona, y de Worten Tarragona. Y es que la compañía ha contado con la asesoría de la consultora inmobiliaria internacional Catella para este proyecto.
Además, esta nueva tienda muestra cómo la omnicanalidad es clave para Worten. Y es que el punto de venta de Madrid cuenta con pantallas y soportes digitales informativos donde los visitantes pueden consultar toda la oferta integral. Así, los clientes podrán acceder a todo el surtido presente, pero también al de toda la compañía en España con la posibilidad de elegir dónde y cuándo quieren recoger el producto, si desea acceder a él en esa misma tienda, en otro Worten o si prefiere recibirlo en casa.
