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La ley de inteligencia artificial es ratificada por el Parlamento Europeo



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El Parlamento Europeo aprueba la Artificial Intelligence Act, la ley de inteligencia artificial. No obstante, para la plena aplicación del texto legal por parte de los tribunales habrá que esperar a 2026

Actualizado el 14 mar 2024



Sede de la Unión Europea.
Sede de la Unión Europea.

Desde hace un par de años la Unión Europea preparaba una propuesta para regular la inteligencia artificial, una tecnología que está en el centro del debate público y que suscita admiración, interés y también temores.

Este lento proceso legislativo de repente se aceleró en 2023 tras la irrupción del modelo de IA generativa de ChatGPT, y que, en muy poco tiempo, ha dado la posibilidad a millones de personas en todo el mundo de conocer el alcance de una tecnología que está llamada a revolucionar el mundo.

El objetivo último de la UE con esta ley de inteligencia artificial es evitar lo que pasó con las redes sociales, a las que de entrada nadie prestó atención, pero que luego han supuesto una amenaza seria para derechos fundamentales e incluso para la estabilidad de los sistemas políticos.

Tramitación de la ley de inteligencia artificial

La aprobación de la ley de inteligencia artificial (o Artificial Intelligence Act, como se la conoce en inglés) por parte del Parlamento Europeo y los estados era una de las metas que se había propuesto la última presidencia española del Consejo de la UE, que acabó el pasado mes de diciembre.

Y ayer llegó la ratificación de la ley por por el propio Parlamento. “Celebro el abrumador apoyo del Parlamento Europeo a nuestra ley de inteligencia artificial, la primera norma global y vinculante del mundo para una inteligencia artificial fiable”, indicó tras el voto el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton. Con 523 votos a favor, 46 en contra y 49 abstenciones, la Eurocámara avaló el texto.

Los próximos pasos

A pesar de la aprobación del reglamento de la Ley de IA por parte del Parlamento comunitario, aún el texto está sujeto a una última comprobación jurídica-lingüística. Y su aprobación definitiva (mediante el llamado procedimiento de corrección de errores) está prevista para antes del final de la legislatura, que se producirá en junio de este año.

Una vez llegado a ese punto, entrará en vigor 20 días después de su publicación en el Diario Oficial. Y será de plena aplicación, en casi todos sus preceptos, 24 meses después de su entrada en vigor. Es decir, que hasta 2026 la Ley de inteligencia artificial europea no tendrá efectos jurídicos para los ciudadanos y empresas de la UE.

La IA generativa será clasificada por su nivel de peligrosidad

Frente al borrador de la ley, redactado en el verano de 2023, hay varias novedades interesantes. Una de ellas es que la IA generativa, la de chats como ChatGPT, será finalmente clasificada por su nivel de peligrosidad. Como ya se sabía, habrá cuatro niveles de riesgo, que irán de “mínimo” a “inaceptable”. Asimismo, también se sabe que la IA deberá respetar los derechos de autor. Y, para ello, la ley obligará a las máquinas y a aquellos que las usan a cumplir con la legislación vigente de copyright en la UE.

Asimismo, la ley, en línea con lo marcado por el borrador, contempla la limitación de lA en labores de vigilancia. Con el objetivo de proteger los derechos de privacidad de los ciudadanos se limitará el uso de sistemas de identificación biométrica en espacios públicos por parte de las autoridades policiales. Solo se permitirá este tipo de uso ante causas de fuerza mayor, como amenazas terroristas o identificación de víctimas, por ejemplo. Y siempre bajo unas condiciones muy concretas.

Por último, la nueva ley establece multas que oscilan los 7,5 millones de euros o el 1,5% de la facturación anual de una compañía. Aunque en los casos más graves podrán llegar a los 35 millones de euros y el 7% del volumen de negocio anual.

Antecedentes de la ley

Hay que recordar que el borrador de la ley se redactó a mediados de 2023 en tiempo récord (11 días) y partía de un texto previo que data de 2021. Con esta propuesta legislativa, que en su momento recibió mucha atención mediática, Bruselas pretendía “garantizar que los sistemas de IA sean supervisados ​​por personas, sean seguros, transparentes, rastreables, no discriminatorios y respetuosos con el medio ambiente”.

También Europa buscaba “una definición uniforme de IA diseñada para ser tecnológicamente neutral, de modo que pueda aplicarse a los sistemas de IA de hoy y de mañana”. Para evitar que la ley quede obsoleta al poco de aprobarse, los legisladores comunitarios querían, además, que con ella se regulen los usos, y no tanto las tecnologías que la hacen posible.

NOTA: Esta información esta actualizada al día 14 de marzo de 2024.

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